Decenas de manifestantes bloquearon este lunes la entrada principal al edificio de la Knéset pidiendo nuevas elecciones, antes de ser dispersados por la fuerza por la policía, que arrestó a un manifestante, informó Haaretz.

La protesta fue organizada por familiares de víctimas de las masacres de Hamás el 7 de octubre.

Roni Goren Ben Zvi, hermano de Yonatan Richter, asesinado en el festival de música Nova, dijo: “Mi hermano fue asesinado por culpa de un hombre que durante ocho años ha estado librando una guerra privada contra todo el país para sobrevivir, escapar de su juicio y seguir robando nuestro dinero. Solo los tontos creen sus mentiras”.

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“Netanyahu es un narcisista que nunca piensa en la seguridad de sus ciudadanos ni de su país. 1,500 ciudadanos muertos lo demuestran. No hay ningún país en el mundo cuyo primer ministro no dimita al día siguiente. Tenemos un fuerte sistema de seguridad que siempre nos protegerá, pero el que está allí solo se protege a sí mismo”.

Noga Meshulam afirmó: “Es imposible que el gobierno que nos ha llevado a este desastre después de 15 años en el poder siga gobernando. El gobierno no está funcionando y está controlado por extremistas”.

Shai Harel agregó: “No entiendo a los policías que perdieron a casi 60 de sus hermanos. ¿Cómo pueden proteger a los corruptos? Hemos dado décadas de nuestras vidas al país y estamos dispuestos a dar todo, pero no a esta gente corrupta”.

Los organizadores de la protesta dijeron que “cualquier esperanza que teníamos de que el gobierno estuviera a la altura de las circunstancias de emergencia se hizo añicos a la luz de su conducta fallida, reflejada en la disfunción, en el abandono de los rehenes, en una golpe mortal a la imagen internacional del país, en continua incitación y división contra varios sectores de la población israelí, y desvío de fondos para beneficiar intereses personales a expensas del público”.

El sábado por la noche, miles de personas se manifestaron en Tel Aviv, Haifa y cerca de la residencia privada de Netanyahu en Cesarea, pidiendo la disolución la Knéset y elecciones anticipadas. Entre los asistentes se encontraban evacuados de las comunidades fronterizas norte y sur, así como familiares de las víctimas de la masacre en el festival de música Nova.

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