El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se reunió a puerta cerrada con 35 países donantes y volvió a hacer un llamamiento para restablecer la financiación y nuevas donaciones para la asediada agencia de la ONU para los refugiados palestinos, informó The Times of Israel.
El jefe de la ONU informó a los embajadores, incluidos los de la Unión Europea, el martes por la noche sobre las acciones que había tomado tras las acusaciones de que 12 empleados de la agencia conocida como UNRWA participaron en los ataques sorpresa de Hamás del 7 de octubre en el sur de Israel.
Calificó las acusaciones israelíes de “horribles” y pidió una investigación rápida.
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Riyad Mansour, el embajador palestino ante la ONU, dijo a los periodistas después de la reunión que el secretario general hizo un llamamiento a muchos países que suspendieron la financiación a la UNRWA después de las acusaciones a “reconsiderar” e instó a otros países “incluidos los de la región, a dar un paso al frente”.
Elogió a Noruega, España y otros que dijeron que no suspenderían la ayuda.
El portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, dijo a los periodistas anteriormente que “ninguna otra organización aparte de la UNRWA tiene la infraestructura para hacer lo que hace” en Gaza y Oriente Medio y “no es factible de ninguna manera” reemplazar rápidamente a la agencia de la ONU.
Dujarric también dijo a los periodistas que cada año la UNRWA proporciona una lista de sus 13.000 empleados en Gaza a Israel y la Autoridad Palestina. “Por lo que me ha dicho la UNRWA, no se plantearon preocupaciones cuando se compartió la lista de personal”, dijo.
