Dirigiéndose a los líderes judíos estadounidenses este domingo, el primer ministro Benjamín Netanyahu argumentó que el ejército israelí está haciendo todo lo posible para proteger a los civiles en Gaza en la guerra contra Hamás, al tiempo que insistió: “Tenemos que terminar el trabajo”, informó The Times of Israel.

Hablando antes de la reunión anual de las principales organizaciones judías estadounidenses en Jerusalén, Netanyahu criticó a Sudáfrica y al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, por acusar a Israel de cometer genocidio en Gaza.

El primer ministro criticó a Lula por los comentarios que hizo este domingo, en los que comparó a Israel con los nazis, diciendo que el único equivalente histórico a los acontecimientos en Gaza fue “cuando Hitler decidió matar a los judíos“.

“Debería avergonzarse de sí mismo”, dijo Netanyahu entre aplausos.

También criticó las peticiones de Sudáfrica a la Corte Internacional de Justicia alegando genocidio y exigiendo órdenes para detener la ofensiva de Israel e impedir que opere en Rafah, el último bastión de Hamás en Gaza.

El tribunal rechazó tales órdenes, aunque advirtió a Israel de la necesidad de proteger a los civiles, dado el creciente número de muertos.

Netanyahu prometió que ninguna de las acusaciones detendría la ofensiva de Israel contra el grupo terrorista de Gaza y prometió una “victoria total contra los salvajes [de Hamás]”.

“Cuando nos propusimos hacer esto, incluso nuestros mejores amigos nos dijeron: ‘No se puede hacer’”, dijo Netanyahu sobre la guerra que Israel ha estado librando contra Hamás.

“Nuestros valientes soldados están en los túneles demoliendo la infraestructura de estos asesinos”, dijo Netanyahu, elogiando a las FDI y los esfuerzos que hacen para proteger a los civiles.

“El ejército israelí está haciendo todo lo que ningún otro ejército ha hecho para proteger a los civiles”, dijo Netanyahu, y agregó que “la victoria total significa la liberación de los rehenes”.

El primer ministro también elogió al gobierno y al público estadounidense por rechazar las acusaciones de genocidio, y agradeció al presidente estadounidense Joe Biden por su ayuda durante la guerra, diciendo que estaba de acuerdo en que se debe hacer todo lo posible para sacar a los civiles de peligro.

Netanyahu continuó pidiendo presión sobre Catar para que presione a Hamás para que libere a los rehenes que todavía tiene en cautiverio.

“Con acuerdo o sin acuerdo, tenemos que terminar el trabajo para lograr la victoria total”, dijo Netanyahu.

“Una cosa que Israel no puede aceptar es un dictado internacional que… imponga un Estado palestino a Israel después de los horrores del 7 de octubre”, dijo, insistiendo en que el pueblo israelí está unido en torno a esto.

Netanyahu pidió a los líderes judíos estadounidenses que adopten la misma resolución que su gabinete aprobó ese mismo día contra cualquier reconocimiento unilateral de un Estado palestino.

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