Siete trabajadores humanitarios de World Central Kitchen murieron en un ataque a sus vehículos en el centro de Gaza el lunes por la noche después de ayudar a entregar alimentos y otros suministros al norte de Gaza que habían llegado horas antes en barco, dijo la organización benéfica el martes por la mañana.
“Esto no es sólo un ataque contra WCK, es un ataque contra organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más espantosas donde los alimentos se utilizan como arma de guerra. Es imperdonable”, dijo en un comunicado la directora ejecutiva de World Central Kitchen, Erin Gore.
Las imágenes mostraron los cuerpos de los muertos en el Hospital de los Mártires de Al-Aqsa en la ciudad de Deir al-Balah, en el centro de Gaza. Varios de ellos llevaban equipo de protección con el logo de la organización benéfica. La declaración de WCK dijo que entre los trabajadores muertos había ciudadanos de Australia, Polonia y Gran Bretaña; uno con doble ciudadanía de Estados Unidos y Canadá; y empleados palestinos locales, informó The Times of Israel.
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شاهد | مركبة مؤسسة المطبخ العالمي التي قصفها جيش الاحتلال بعد مغادرتها مخزناً في دير البلح مما أدى لاستشهاد ركابها pic.twitter.com/XhmzxszIU3
— المركز الفلسطيني للإعلام (@PalinfoAr) April 2, 2024
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, confirmó la muerte del trabajador humanitario australiano Lalzawmi “Zomi” Frankcom, de 44 años, y dijo que su gobierno se había puesto en contacto con Israel para exigir que los responsables rindieran cuentas.
“Es una tragedia humana que nunca debería haber ocurrido, es completamente inaceptable y Australia buscará una rendición de cuentas total y adecuada”, dijo en una conferencia de prensa el martes.
El comunicado de la WKC decía que dos vehículos blindados de marca fueron alcanzados cuando salían de un almacén en Deir Balah, en el centro de Gaza, donde el equipo había descargado la ayuda humanitaria traída a Gaza por la ruta marítima desde Chipre.
El origen del fuego no pudo ser confirmado de forma independiente.
En una respuesta inicial, las FDI no dijeron si eran responsables del ataque, pero afirmaron que estaban “llevando a cabo un examen en profundidad al más alto nivel para comprender las circunstancias de este trágico incidente”.
El ejército añadió que estaba “haciendo grandes esfuerzos para permitir la entrega segura de ayuda humanitaria y ha trabajado estrechamente con World Central Kitchen en sus esfuerzos por proporcionar alimentos y ayuda humanitaria a los residentes de Gaza”.
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Adrienne Watson, dijo en un comunicado el martes temprano que Estados Unidos estaba “desconsolado y profundamente preocupado” por el incidente, y pidió una investigación rápida sobre el presunto ataque de las FDI.
“Se debe proteger a los trabajadores de ayuda humanitaria mientras entregan la ayuda que se necesita desesperadamente”, dijo Watson.
Los barcos de ayuda que llegaron el lunes transportaban unas 400 toneladas de alimentos y suministros en un envío organizado por los Emiratos Árabes Unidos y World Central Kitchen, una organización benéfica fundada por el famoso chef José Andrés. El mes pasado, un barco entregó 200 toneladas de ayuda en una prueba piloto. El ejército israelí participó en la coordinación de ambas entregas.
“Somos conscientes de los informes de que miembros del equipo de World Central Kitchen murieron en un ataque de las FDI mientras trabajaban para apoyar nuestros esfuerzos humanitarios de entrega de alimentos en Gaza”, publicó WCK en X. “Es una tragedia. Los trabajadores de ayuda humanitaria y los civiles NUNCA deberían ser un objetivo. JAMÁS”.
Estados Unidos ha promocionado la ruta marítima como una nueva forma de entregar la ayuda que se necesita desesperadamente al norte de Gaza, donde los grupos de ayuda internacionales advierten que unos 300.000 palestinos enfrentan una hambruna inminente, en gran medida aislados del resto del territorio por las fuerzas israelíes. Israel ha prohibido a la UNRWA, la principal agencia de la ONU en Gaza, realizar entregas al norte, aunque está trabajando con otras organizaciones. Sin embargo, otros grupos de ayuda alegan que enviar convoyes de camiones al norte ha sido demasiado peligroso ya que el ejército no ha garantizado un paso seguro.
En su publicación anterior del lunes X, la WCK dijo que sus equipos se movilizan diariamente en Gaza para distribuir alimentos a los palestinos desplazados.
“Nuestras más de 60 cocinas en el sur y centro de Gaza cocinan cientos de miles de comidas cada día como esta mujadara, un reconfortante plato de arroz, lentejas y cebollas caramelizadas”, dijo.
El ataque se produjo horas después de que las tropas israelíes pusieran fin a una redada de dos semanas en el hospital Shifa, el más grande de Gaza. Durante la redada, que comenzó el 18 de marzo, las FDI dijeron que las tropas capturaron a unos 900 sospechosos, de los cuales se confirmó que más de 500 eran agentes terroristas, y mataron a más de 200 hombres armados. Entre los muertos y detenidos se encontraban altos comandantes de Hamás y de la Jihad Islámica Palestina. También se incautaron valiosas informaciones de inteligencia, dijeron las FDI.
Los testigos que regresaron al lugar después de la retirada del ejército describieron escenas de destrucción en las instalaciones y los vecindarios circundantes. Las imágenes mostraban que los principales edificios de Shifa habían quedado reducidos a carcasas quemadas.
Israel ha dicho que sus fuerzas no dañaron a civiles durante el ataque. El contralmirante Daniel Hagari, máximo portavoz militar, dijo que Hamás y la Jihad Islámica establecieron su principal cuartel general en el norte dentro del hospital. Describió días de combates cuerpo a cuerpo y culpó a Hamás por la destrucción, diciendo que algunos combatientes se atrincheraron dentro de las salas del hospital mientras que otros lanzaron rondas de mortero contra el complejo.
El director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, afirmó que murieron al menos 21 pacientes.
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