Israel y Hamas se preparan para iniciar negociaciones esta semana sobre la segunda fase del alto el fuego en Gaza. Esta fase, según lo previsto, contempla la liberación de los rehenes restantes a cambio del fin definitivo de la guerra por parte de Israel.
Sin embargo, esto probablemente dejaría a Hamás en el poder, incumpliendo la promesa de Netanyahu de desmantelar completamente las capacidades militares y de gobernanza del grupo terrorista.
Para cumplir dicha promesa, el martes, Donald Trump propuso una solución radical: que Estados Unidos se haga cargo de Gaza.
Esta propuesta, que reorientaría drásticamente la geopolítica del Medio Oriente, ofrece una alternativa a la opción de la Autoridad Palestina como gobierno de Gaza, opción que ha sido rechazada repetidamente por Netanyahu, a pesar de haber sido la preferencia de la administración Biden y los aliados árabes.
Según Trump, Estados Unidos “se hará cargo” de la Franja de Gaza, mientras que la población palestina debería abandonar la zona. En una conferencia de prensa conjunta con Benjamin Netanyahu, Trump describió su visión para el área como una nueva “Riviera”. Afirmó que Estados Unidos se encargaría de desmantelar las armas, nivelar el terreno y eliminar los edificios destruidos, argumentando que “no se puede volver” a la situación anterior. Trump añadió que otros líderes de la región apoyan su idea y que planea visitar Gaza, Israel y Arabia Saudita, sin especificar fechas.
Desde su regreso al poder, Trump ha presionado a Egipto y Jordania para que acojan a los gazatíes. Sin embargo, ambos países han rechazado la propuesta, argumentando que desestabilizaría sus naciones y que los palestinos deben tener derecho a permanecer en su tierra, al igual que los israelíes.
Finalmente, Trump aclaró sus planes en comentarios publicados en su plataforma Truth Social. Afirmó que la Franja de Gaza sería cedida a Estados Unidos por Israel al finalizar los combates, y que los palestinos “ya habrían sido reasentados en comunidades mucho más seguras y hermosas, con casas nuevas y modernas, en la región”. Trump añadió que “no se necesitarían soldados estadounidenses”.
El Ministro de Defensa israelí, Israel Katz, declaró haber ordenado al ejército que preparara un plan para permitir la salida voluntaria de los residentes que deseen abandonar Gaza.
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