refugiados

EINAT WILF Y JONATHAN SCHANZER

Suecia es el quinto país mayor simpatizante de la UNRWA – el Organismo de Obras Públicas y Socorro.

Quizás Suecia aún no lo sabe, pero su reciente reconocimiento del Estado de Palestina pudiese entrar en conflicto con su apoyo a la organización de refugiados de las Naciones Unidas a la que contribuye con decenas de millones de dólares anuales.

Israel retiró su embajador luego de que Stockholm reconoció al estado palestino el 30 de octubre. En Jerusalem insisten que el apoyo de iniciativas palestinas unilaterales en las Naciones Unidas es sólo representa una dificultad para que los palestinos vuelvan a la mesa de negociaciones para abordar los temas principales y lograr una paz duradera. Sin embargo, los suecos insisten que su reconocimiento de Palestina tiene por objeto promover una coexistencia pacífica entre Israel y los palestinos.¨

Aparentemente estas son buenas intenciones, pero el problema es que Suecia es el quinto país mayor simpatizante de la UNRWA – el Organismo de Obras Públicas y Socorro, que proporciona servicios sociales y asistencia a refugiados palestinos de la guerra entre judíos y árabes de 1947-1949.

La UNRWA fue criticada por el hallazgo de un túnel de Hamas debajo de sus instalaciones y por devolver a las ¨autoridades¨ de la organización el arsenal de cohetes enconytrado en sus escuelas durante la Operación Margen Protector. Pero eso no es nada en comparación del desprecio que se ha ganado con su política de reconocer a los descendientes de los refugiados originales – un enfoque que se vincula con la proliferación del número de 800,000 refugiados en 1949 a más de cinco millones actualmente.

En realidad, la UNRWA ha perpetuado el problema de los refugiados haciendo imposible que se resuelva su situación si esto no implica el ¨retorno a Palestina¨.

Para los suecos, el problema no es sólo el financiamiento de este organismo de las Naciones Unidas con 54.4 millones de dólares el año pasado, sino que aparentemente se han atado a esta política mediante el reconocimiento de Palestina.

Los suecos consideran que ¨Palestina cumple con los criterios del derecho internacional, ya que cuentan con un territorio, un pueblo y un gobierno.¨ Ellos se refieren al territorio anterior a la guerra de 1967 – Judea, Samaria y Gaza.

Actualmente, aproximadamente dos millones de palestinos radican en Gaza y Cisjordania, siendo éste el territorio que Suecia reconoce como el estado Palestino.

¿Cómo pueden entonces seguir siendo registrados como ¨refugiados de Palestina¨ – el país al cual demandan retornar – si ya existe un estado? Es decir, Suecia presenta una contradicción fundamental al respaldar a la UNRWA y a su vez apoyar la iniciativa unilateral para el reconocimiento de un estado palestino. Recientemente, otros países europeos como España, Gran Bretaña e Irlanda han expresado su apoyo por un estado palestino al mismo tiempo que sustentan a la UNRWA.

Esta contradicción no es meramente simbólica. El problema de los refugiados es uno de los principales conflictos a resolver entre palestinos e israelíes. Cinco millones de palestinos árabes que actualmente están registrados como ¨refugiados de Palestina¨ (dos millones en Cisjordania y Gaza, un millón de jordanos y otro millón en Siria y Líbano) exigen el ¨retorno¨ a lo que reclaman como su patria histórica. Si estos cinco millones de palestinos se aúnan a cerca de dos millones de palestinos árabes que ya son ciudadanos israelíes, habría un cambio demográfico masivo. En dado caso, los judíos de Israel serían relegados a una minoría. Esta es la razón por la que los israelíes han rechazado consistentemente el ¨derecho al retorno¨ de los palestinos. No obstante, los palestinos insisten que esta es una demanda fundamental que formará parte de cualquier acuerdo de paz.

Para cerciorarse que los palestinos toman en serio su demanda del ¨retorno¨, basta con leer un reciente informe del Grupo de Crisis Internacional titulado ¨Volviendo a la Cuestión de los Refugiados Palestinos.¨ El informe enfatiza la medida en la que diplomáticos occidentales subestiman la importancia que tiene esta demanda para los palestinos, así como el ¨significado casi sobrenatural¨ que los palestinos atribuyen a la UNRWA como organismo que representa el apoyo internacional por la demanda del ¨retorno a Palestina.¨

Ahora que Suecia considera que Palestina cumple con los criterios de un estado, ¿estará preparado para tomar en cuenta la antigua narrativa de los refugiados palestinos y la función de la UNRWA en su perpetuación? Esto se lograría mediante una declaración indicando que los palestinos que radican en Palestina (Judea, Samaria y Gaza) ya no serían reconocidos como ¨refugiados.¨

Si los suecos no logran adoptar esta simple y lógica iniciativa implicaría que su reconocimiento de un estado palestino no tiene por objeto promover una coexistencia pacífica entre Israel y los palestinos, sino que perpetua las políticas peligrosas e irredimibles que han caracterizado la narrativa palestina por tanto tiempo, sin mencionar la agencia de refugiados que aparenta hablar en su nombre.

Einat Wilf, ex integrante de la Knesset, es un alto miembro del Instituto de Política del Pueblo Judío y miembro adjunto del Instituto Washington para la Política del Cercano Oriente. Jonathan Schanzer, ex analista en terrorismo en el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, es vice-presidente de investigación en la Fundación para la Defensa de Democracias.

Traducción: Esti Peled.

Fuente: Jerusalem Post.