TERRA

El Ejército israelí desplegó hoy la segunda batería del sistema “Iron Dome” (Cúpula de Hierro) en la ciudad de Ashkelón, con el objetivo de interceptar cohetes disparados desde la franja palestina de Gaza.

Ashkelón, con 150.000 habitantes y situada a unos ocho kilómetros del norte de Gaza, es desde hace una década uno de los blancos preferidos de las milicias palestinas y la segunda que cuenta con una batería anticohetes, después de la desplegada recientemente en los alrededores de Beer Sheva, la capital del Neguev.

El sistema tiene por misión garantizar al máximo posible la protección de zonas pobladas e instalaciones estratégicas como centrales eléctricas o puertos.

En los próximos meses se desplegarán otras baterías en los alrededores del área metropolitana de Tel Aviv, informaron medios locales.
La relativa calma que regía en los alrededores de la franja de Gaza en los últimos días ha permitido a la Fuerza Aérea continuar probando el sistema en varias localizaciones.

Sin embargo, los recientes ataques del Ejército israelí en la franja, que se han cobrado la vida de tres milicianos del grupo islamista Hamás, han llevado a las facciones armadas palestinas a prometer venganza “en el momento oportuno”.

El nuevo sistema emplea cámaras y radares para detectar proyectiles y disparar contra ellos con el fin de interceptarlos en el aire, si su trayectoria amenaza zonas pobladas.

Con todo, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió cuando se colocó la primera batería que se trataba de “una solución parcial”, que no acabará por si sola con los ataques procedentes de Gaza.