IANUS Y SEKER
Punjab, Pakistán. Cientos de musulmanes atacaron la aldea cristiana de Khokarki hoy a la mañana a pocos kilómetros de la ciudad de Gujranwala (Punjab), obligando a sus habitantes a huir. Según fuentes de la AsiaNews, que prefirieron mantener el anonimato por razones de seguridad, el ataque tuvo lugar tras una disputa entre un cristiano de nombre Christian Mushtag Gill y algunos musulmanes locales, que lo habían acusado al hombre y a su hijo de blasfemia.
Mushtaq, de 60 años, y su hijo, están acusados ​​de haber profanado el Corán. La policía los arrestó ayer, después de las quejas de algunos musulmanes que afirman haber encontrado páginas arrancadas del Corán en una bolsa escondida cerca de la casa de los dos cristianos.
Mushtaq Gill es el vicepresidente del Centro cristiano de Formación Técnica (CTTC), vinculado al seminario teológico en Gujranwala. Después de la detención policial fueron llevados a la estación de policía local para un interrogatorio preliminar.
Según fuentes locales, el caso aún no ha sido registrado por la policía, que están llevando a cabo la investigación. La noticia desató el pánico entre la comunidad cristiana, mientras que la familia de los dos acusados ​​se vio obligada a abandonar su hogar y buscar refugio con sus amigos.
Para ayudar a Mushtaq y su hijo, la familia se puso en contacto con la fundación Masihi, una asociación especializada en la defensa de las minorías religiosas. Naz Masih Ishaq, vicepresidente de la fundación, dijo que ya habían intentado contactar con las autoridades de Gujranwala para resolver la situación. Gujranwala y sus alrededores se encuentran entre los centros más activos de los extremistas islámicos. En el pasado, ha habido varios incidentes en la ciudad de ataques contra iglesias, ocupación de la propiedad cristiana y asesinatos ligados a falsas acusaciones de blasfemia.
El 5 de abril en Chak Jhumra (Faisalab, Punjab), otro cristiano, Arif Masih, fue detenido por la policía por su presunta extracción de páginas del Corán. La comunidad musulmana en el pueblo tomó la defensa del hombre, que es víctima de una venganza personal por un asunto relacionado con propiedades. Según datos de la Comisión Nacional de Justicia y Paz de la Iglesia Católica (CNJP), entre 1986 y agosto de 2009 por lo menos 964 personas fueron acusadas ​​de profanar el Corán o difamar al profeta Mahoma. Entre estos, 479 eran musulmanes, 119 cristianos, 340 ahmadis, 14 hindúes y 10 de otras religiones. También proporciona un pretexto para los ataques, venganzas personales o asesinatos extra judiciales: 33 en total, efectuados por personas o multitudes enfurecidas.