*BENJAMÍN LAUREANO LUNA, 30 junio – El consejo Supremo de las Fuerzas Armadas de Egipto que gobierna a la Nación a partir de la caída del Presidente Hosni Mubarak, provocada por las protestas populares por su permanencia en el poder durante 30 años, HA TRAICIONADO a los egipcios que se movilizaron para protestar, contando con el respaldo de los militares que dejaron hacer y dejaron pasar a los jóvenes, para aprovechar la revuelta, con lo que escalaron el poder y, ahora que no han cumplido con las reformas prometidas, ORDENARON LA REPRESIÓN  A LOS MANIFESTANTES  que acudieron a la plaza Tahrir a exigir el cumplimiento del objetivo de la lucha, y la violencia policíaca dejó tendidos a mil treinta y cuatro heridos el día 29 de junio.

Engaños similares preparan otros dictadores árabes que se encuentran en la posibilidad de caer del poder, como el caso de Bashir Al Assad, en Siria, el cual es presionado por el pueblo en diversas ciudades y en contestación, ha cañoneado, ametrallado y bombardeado desde el aire, a los manifestantes. Para salvarse de la presión popular, PLANEAN DESVIAR LA ATENCIÓN DE LOS PUEBLOS, HACIÉNDOLES CREER QUE MEDIANTE PROTESTAS POPULARES SE OBLIGARÁ A LAS NACIONES UNIDAS A ACEPTAR LA CREACIÓN DEL ESTADO PALESTINO. Para lograr esta desviación de atención, los propios dictadores organizarán las manifestaciones.

El otro mecanismo de desviación de atención es la flotilla que navega rumbo a Gaza y para romper el bloqueo originado por el conflicto armado entre la guerrilla terrorista, Hamás bombardea con morteros y cohetes a Israel.

Esta flotilla aparentemente pacifista, tiene como objetivo la guerra psicológica para desencadenar odio internacional a Israel.

Mediante negociaciones directas entre la Autoridad Nacional Palestina y el Gobierno de Israel, debe llegarse a un acuerdo, pero la AUTORIDAD PALESTINA SE HA NEGADO A RECONOCER QUE ISRAEL ES UN ESTADO JUDÍO, por ello suspendió las negociaciones, invocando la cultura de los milagros de las “alfombras voladoras”, pues pretende unilateralmente presentar su caso en septiembre próximo a la Asamblea General de las Naciones Unidad, que está impedida a aceptar a nuevos Estados, si PREVIAMENTE EL CONSEJO DE SEGURIDAD NO LO HA DECIDIDO ASÍ. Por ello los palestinos primero tienen que negociar con Israel, después de llegar a un acuerdo, presentar el caso a la consideración del Consejo de Seguridad y es el propio Consejo el que debe presentar el caso a la Asamblea General.

El Frente Internacional de Derechos Humanos alerta a los pueblos árabes para que no se dejen engañar por sus dictaduras.

 

*Presidente del Frente Internacional de Derechos Humanos.