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El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, prometió hoy con dar una “respuesta adecuada” al atentado registrado este jueves en el sur de Israel, en el que murieron al menos siete israelíes y otra treintena resultaron heridos, cinco de ellos de gravedad.
En un posterior tiroteo con las Fuerzas de Seguridad también perdieron la vida siete de los presuntos terroristas, según una información difundida por el Ejército judío a través de las redes sociales.
“Se trata de unos hechos muy graves que han causado daño a israelíes y a la soberanía israelí. Israel responderá de la forma adecuada”, advirtió el primer ministro, en un comunicado remitido por su oficina tras reunirse con altos mandos militares.
El atentado se produjo poco después del mediodía, cuando un grupo de hombres armados abrió fuego contra un autobús y otros vehículos en una de las carreteras del sur de Israel próxima a la frontera con Egipto.
Ningún grupo se ha atribuido aún la autoría de la masacre, aunque la identidad de los autores podría conocerse en breve ya que las Fuerzas Armadas tienen los cuerpos de los siete presuntos terroristas abatidos y según portavoces castrenses “no se tardará en conseguir una identificación”.
No obstante, el ministro de Defensa, Ehud Barak, ya ha señalado a grupos palestinos en Gaza, lo que ha desatado las alarmas en el citado territorio palestino.
“La fuente de los actos terroristas es Gaza y nosotros actuaremos con plena fuerza y determinación contra ellos”, advirtió el responsable israelí.
El movimiento islamista Hamás, que se ha desvinculado de los ataques -aunque uno de sus miembros los ha alabado-, ordenó horas después evacuar todas las dependencias oficiales y comandancias de sus fuerzas de seguridad ante el temor de bombardeos aéreos israelíes en represalia.