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El Tribunal Superior de Australia decidirá si extradita a Hungría al presunto criminal de guerra nazi Charles Zentai tras admitir un recurso del gobierno australiano, informaron hoy medios locales.

El caso pasará a la máxima instancia judicial australiana después de que el ministro del Interior, Brendan O’Connor, obtuvo luz verde para seguir con la larga batalla legal para extraditar a Zentai, indicó la agencia local AAP.

Camberra autorizó la extradición en 2009, pero el ahora nonagenario, residente en Perth, presentó una apelación que ganó en agosto pasado.

El Tribunal Federal determinó entonces que el delito de “crimen de guerra” no era contemplado por las leyes húngaras en 1944, por lo que el despacho de O’Connor no pudo aprobar su extradición a Hungría.

Ahora, el Superior deberá determinar si el tratado de extradición entre Australia y Hungría se aplica o no únicamente cuando el crimen era considerado como tal en el momento en que presuntamente fue cometido.

También determinará si la conducta de Zentai, quien se encuentra en libertad condicional, constituyó un delito en el momento en que supuestamente ocurrió.

Después de la guerra, Zentai emigró a Australia, adquirió la nacionalidad australiana y vivió sin llamar la atención hasta que Hungría pidió su extradición en 2005.

El Centro Simon Wiesensthal, organización israelí que persigue a antiguos criminales de guerra nazis, sostiene que Zentai torturó y mató a un adolescente judío en Budapest, en 1944, cuando era soldado del Ejército húngaro, entonces aliado con el III Reich.

Según la investigación, Zentai y dos compañeros apresaron a la víctima, Peter Balazs, un judío que no llevaba la obligatoria estrella de David en la manga, pero al que reconocieron porque era del pueblo natal del acusado.

Acto seguido, trasladaron a la víctima a una base militar, donde la golpearon hasta la muerte y después arrojaron su cadáver al río Danubio, como era habitual en la Budapest ocupada por los nazis.

Zentai niega haber participado en ese asesinato y asegura que nunca fue miembro de los notorios Flecha Cruz, grupo paramilitar inspirado en la SS nazi que sembró durante aquellos años el terror en Hungría.