LARAZON.ES

En una entrevista con LARAZON.ES, Moshe Yaalon, quien es el Ministro israelí de Asuntos Estratégicos, explica las en qué consiste el peligro iraní y cuáles son las acciones necesarias para la afrenta que tiene que pasar Israel por Irán.

–¿Qué amenaza representa Irán?
–La amenaza iraní lo es no sólo para Israel sino para todo el mundo occidental. Es un régimen mesiánico y apocalíptico que quiere imponer su islam. En Oriente Medio vemos el rol negativo que desempeña con Hizbulá, Hamas y otras organizaciones terroristas, e intentando desestabilizar Bahréin, Yemen, Irak o Afganistán. Apoyan con dinero, armas, conocimientos e impulso a perpetrar atentados en regímenes moderados.

–Estos días se multiplican las informaciones sobre explosiones misteriosas en Irán ¿Cree que todo es producto de una misma mano misteriosa?
–Yo creo que es mejor dejarlo a nivel de «siata dishmaya» (con la ayuda de Dios).

–¿Hay solución militar para el peligro nuclear de Irán?
–Considero que ante todo Occidente debe irradiar determinación. Si bien Obama y otros dirigentes han dicho que de una u otra forma hay que impedir que Irán alcance capacidad atómica militar, se hace imperiosa una estrategia que lleve al aislamiento político del régimen iraní, a duras sanciones económicas y al apoyo a la oposición iraní, así como una opción militar creíble. Estos cuatro elementos deben ser claros en el enfoque de Occidente. Cuanto más efectivos sean los otros medios, menos habrá que pensar en la opción militar. Si el régimen iraní llega a una situación en la que comprenden que las opciones son una bomba atómica o su preservación, optará por seguir existiendo. La determinación occidental es lo que debe lograr que el régimen deje de lado la búsqueda de la bomba. Si no hay más remedio, alguien tendrá que usar la fuerza.

-¿Israel tendría que actuar en solitario?
–No voy a entrar en eso, pero está claro que el Estado de Israel tiene, por supuesto, la esperanza de que otros cumplan con esa conocida frase de que otros hacen el trabajo por los justos. Pero si es necesario, tendrá que defenderse.