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Israel pidió hoy a las autoridades egipcias que autoricen el aterrizaje en El Cairo de dos aviones encargados de repatriar el material de la embajada y de los diplomáticos israelíes en Egipto, informaron fuentes diplomáticas egipcias.

Las fuentes, citadas por la agencia oficial Mena, explicaron que ese material abarca las propiedades inmobiliarias, personales y profesionales de los diplomáticos israelíes que se encontraban en Egipto antes de que su embajada en El Cairo fuera atacada en septiembre pasado.

Dos aviones israelíes tienen previsto repatriar aparatos, archivos, informes y propiedades personales, entre otros objetos de la legación.

Las fuentes añadieron que, desde el ataque a su embajada, Israel mantuvo en Egipto a cuatro de los diecisiete diplomáticos que formaban parte de su legación y explicó que las mudanzas de los trece repatriados todavía no han sido trasladadas a su país.

Según las fuentes, esta es una medida rutinaria carente de otro significado y que la suele llevar a cabo cualquier diplomático egipcio cuando acaba su misión en el Estado donde trabajaba.

Mientras, una fuente de seguridad que pidió el anonimato aseguró a Efe que el personal de la embajada israelí vació anoche su actual sede, trasladó una parte de su material a otro sitio “desconocido” y envió la otra parte al aeropuerto de El Cairo para repatriarla.

El pasado 9 de septiembre, decenas de manifestantes irrumpieron en el edificio donde se halla la embajada israelí en El Cairo después de que centenares de personas se concentraran allí en protesta por la muerte de cinco miembros de las fuerzas de seguridad egipcias en el Sinaí por un ataque israelí.

Desde entonces, la representación diplomática de Israel en Egipto se encontraba bajo mínimos y trabajaba desde la residencia del actual embajador israelí, Yaacov Amitai.

Egipto e Israel firmaron la paz bilateral en 1979 conforme a los Acuerdos de Camp David, suscritos en septiembre de 1978, aunque tras la llamada Revolución del 25 de Enero del 2011, que llevó a la caída del entonces presidente Hosni Mubarak, ha crecido la hostilidad manifiesta hacia Israel en la calle.