BENJAMÍN LAUREANO LUNA PARA ENLACE JUDÍO

Mientras el Pueblo de Israel celebró entre fogatas, rezos y bailes el Lag Baomer, los políticos, en la oscuridad, acordaron evitar llevar a cabo elecciones adelantadas y la disolución de la Knéset y, al efecto, Shaúl Mófaz, nuevo dirigente de Kadima, ofreció en apoyo a sus 28 diputados, para respaldar al gobierno de Benjamín Netanyahu, a cambio de llegar al poder en calidad de Vicepresidente, sustituto del actual Primer MInistro, forjando una “poderosa” coalición de Gobierno, que estará en capacidad de llevar a cabo acciones para enfrentar el peligro nuclear iraní, País en el que el dictador Mahmoud Ahmadineyad, ha perdido la mayoría en el Parlamento y el poder se concentró en el Ayatolá Jamenei.

El poder político tiene diversas características que lo integran: El apoyo del Pueblo: En este caso el acuerdo se hizo a espaldas del Pueblo, por lo mismo carece de legitimidad. Otro de los aspectos es la existencia de la Unidad Nacional, que en este caso, se ha logrado unificando a los dirigentes de los partidos, más no el apoyo de las bases de esos partidos. Las Fuerzas Armadas sí están representadas, pues tanto Iehud Barak, actual Ministro de Defensa, como Benjamín Netanyahu, Primer Ministro y Shaúl Mofaz, ex Ministro de Defensa, proceden de la misma unidad militar del Comando de Élite de la Brigada de Paracaidistas (Sayeret Matkal), por ello podríamos decir que es el “Triunvirato Sayeret Matkal”.

El Presidente de EE.UU., Barack Obama, por estar ocupado en su reelección, no desea que Israel ataque a las instalaciones nucleares de Irán. Consecuentemente el triunvirato no cuenta con el vital apoyo de Estados Unidos. Europa tiene conflictos de recesión (España) y de cambios de gobierno, como en Francia, que modifican las estrategias anteriores europeas ¿Sabrán tener paciencia (sablanut) los triunviros?. Israel puede caer al despeñadero si hay precipitación, por el ansia de atraer al Pueblo de Israel para hacerse poderosos.