*RODICA RADIAN GORDON
Peraj, el acrónimo en hebreo de Proyecto Tutorial, que también significa flor, nació en 1972 en el Instituto Weizmann de Israel. Siendo una iniciativa de científicos y estudiantes de dicho instituto, la meta era tutorar a través de estudiantes a niños necesitados de ayuda académica y emocional. La filosofía que orienta Peraj busca proveer un marco informal y personal que permita una interacción directa entre el tutor y el niño, el primero actuando como si fuese un “hermano mayor y modelo positivo” para que el segundo se pueda identificar con él.
También puede interesarte
En Israel el niño aprendiz se caracteriza por provenir de un estrato socioeconómico bajo, con necesidades educativas y emocionales. Parte de ellos tienen algún familiar que enfrenta serias dificultades, otros tienen discapacidades físicas o bien son estudiantes de preparatoria que pertenecen a comunidades periféricas y necesitan ayuda para obtener el título de bachillerato.
Los estudiantes provienen así de diferentes sectores sociales y de todas las regiones tanto centrales como periféricas del país. Ellos gozan de becas o créditos universitarios, pero una gran mayoría de ellos atestiguan que el beneficio real del programa es la satisfacción de poder contribuir a la consolidación de la sociedad.
En 2008 Peraj ganó el Premio Israel, en la categoría de Contribución Especial a la Sociedad y al Estado, que es la más alta distinción que el país otorga. Entre las razones que los jueces esgrimieron para tan prestigioso galardón destaca el que esta iniciativa ha tenido un impacto sustantivo sobre la vida de más de un millón de israelíes (12% de la población total), y que con su carácter profesional actúa como un agente de cambio en todas las áreas de la educación, desde la preescolar hasta la universitaria.
A través de los años de su existencia Peraj se ha convertido en el proyecto tutorial más grande del mundo, y es una fuente de inspiración e instrucción para otros proyectos similares en casi 20 países. México es uno de esos países donde dicha iniciativa es conocida como Peraj – adopta un amig@. En el programa mexicano, que comenzó en 2004, participan cerca de 45 universidades del país como parte de sus programas de servicio social. Peraj México cuenta con tres mil 400 niños y una cifra igual de tutores. El programa también prevé un intercambio de experiencias con los directivos israelíes en un futuro próximo.
Sin lugar a dudas, Peraj es una iniciativa ejemplar que parte de la sociedad civil y llega a toda la población, contribuyendo de un modo sustancial a su cohesión y consolidación, ya que una de las características más importantes del proyecto es su capacidad de inclusión de los sectores más marginados de la sociedad. La idea de generar “modelos positivos” contribuye, a su vez, al empoderamiento de los participantes, tanto de los alumnos como los tutores. Este empoderamiento va más allá de la esfera educativa y, como tal, contribuye a forjar un patrón de vida para la gente involucrada.
* Embajadora de Israel en México
