JULIÁN SCHVINDLERMAN

El silencio oficial respecto de la crisis política y humanitaria en Siria rápidamente está alcanzando la magnitud del escándalo . Para un gobierno que ha hecho de los derechos humanos una causa primordial, su postura discreta es inadmisible moralmente .

El mensaje que están dando la Casa Rosada y el Palacio San Martín a los argentinos y al mundo entero es que al Gobierno le importan exclusivamente los derechos humanos cuando atañen a los años setenta, aquí, y nada más.

Por eso no ven inconsistencia alguna en visitar a un dictador que lleva décadas en el poder en Angola, comerciar con un tirano legendario como Muhamar Kaddafi oportunamente, instruir al delegado argentino ante la ONU en Nueva York a permanecer en su asiento mientras el presidente de Irán daba un discurso extremo, solidarizarse con la longeva tiranía de los hermanos Castro en Cuba y codearse con el poco demócrata Hugo Chávez. Para una Presidenta y un canciller usualmente propensos a la crítica pública hacia terceros, callar ante los crímenes atroces del carnicero de Damasco es insólito.

En su sitio oficial, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto informa que nuestro país representará a Latinoamérica como miembro no-permanente en el Consejo de Seguridad para el bienio 2013-2014. En su texto, el Gobierno orgullosamente anuncia: “Todos los miembros de las Naciones Unidas pueden confiar que la defensa de la paz, la seguridad, la soberanía y el fin del colonialismo contarán con un país, Argentina, que será un defensor incansable de los valores fundantes de la organización multilateral”.

Es curioso que los derechos humanos, tan proclamados en casa, no hayan sido mencionados.

Pero si realmente la Presidencia y la Cancillería anhelan honrar esta promesa solemne, deberán recordar que entre los valores fundacionales de la ONU se encuentra el compromiso de proteger globalmente los derechos humanos universales. Si la vocación declarada es sincera, no habrá necesidad de esperar hasta el 2013 o el 2014. La defensa de los derechos humanos, este año en Siria, puede comenzar inmediatamente.