VICENTE OLVERA PARA ENLACE JUDÍO

La noche del jueves 7 de junio se proyectó en el Centro Maguén David la película Fireproof, “Prueba de Fuego”, dirigida por Alex Kendrick y protagonizada por Kirk Cameron y Erin Bethea.

La película se estrenó en septiembre del 2008 en Estados Unidos consiguiendo rápidamente un éxito cinematográfico y convirtiéndose así en una de las películas más taquilleras. Debido a su éxito ha sido catalogada como una de las películas de fe más importantes.

Es por esta razón que el Comité de Valores y Grupo Rescate decidieron proyectarla dentro de su ciclo Reflexcine, pues toca un tema de suma importancia actualmente dentro de la Comunidad: El Divorcio.

La película resulta ser una lección de vida para cualquier matrimonio ya que trata aspectos que frecuentemente se descuidan entre los esposos como el respeto, la ternura y lo más importante, saber escuchar.

En el film se cuenta la relación matrimonial y los problemas de pareja que enfrentan Caleb Holt, un bombero de Albany, Georgia, y su esposa Catherine cuando su matrimonio parece desbaratarse y se torna al borde del divorcio, es entonces que el padre de Caleb le da un regalo especial, una especie de reto del amor, con la esperanza de que le ayude a salvarlo.

Durante el desarrollo de la película, Caleb tiene que enfrentar varias pruebas, y decisiones que le cambian la vida; una de ellas es entregarle su vida a Dios y esperar que él pueda ayudarle a salvar su matrimonio.

Al término de la cinta el Dr. David Szydlo, psicoanalista, comentó los puntos principales de la película y dijo que grupos como Umbral, Menorah y recientemente Rescate “son de suma importancia en lo que respecta a tratar los problemas que aquejan a la comunidad y preparar a los jóvenes para este tipo de situaciones, pero el problema es que estamos fallando, el índice de divorcios en la comunidad sigue siendo muy alto”.

Y agregó que “la pregunta que debemos hacernos después de ver esta película es ¿qué es lo que está pasando? Algo en lo que debemos de reflexionar es en que nosotros como padres, como educadores en las escuelas, algo mal estamos haciendo, con algo no estamos cumpliendo para que los jóvenes lleguen a estos problemas en lugar de llegar a algo así como la culminación de una serie de principios y valores que les damos a lo largo de su vida y las puedan aplicar de tal forma que puedan tener vidas exitosas”.