ENLACE JUDÍO

“Cáncer” es una palabra que genera gran temor en la mayor arte de la gente. Y no es únicamente por los efectos finales de esta terrible enfermedad, sino también por el sufrimiento moral y físico de las personas que lo padecen- sufrimiento que, en gran parte, se debe a los efectos secundarios de los tratamientos tradicionales como quimioterapias, radiaciones y cirugías.

Como si lo anterior no fuera suficiente, el costo monetario que los enfermos asumen es, en muchas ocasiones, devastador para la economía de las familias.

Aún así, una alternativa para el tratamiento del cáncer ha sido llamada “la esperanza azul”, pues ha proporcionado a muchos enfermos una mejor calidad de vida.

Algunos pacientes quienes lo utilizaron a la par de los tratamientos convencionales, le atribuyen parte de su sanación.

Cerca de 60.000 personas han probado el escozul, derivado de las toxinas del escorpión azul, desde que el biólogo Misael Bordier comenzó a aplicarlo en Guantánamo, al este de Cuba, para combatir el cáncer, a principios de la década de 1990.

Antonio Duek, fundador de la clínica Dell Ser- ubicada en Euler # 128, Mezzanine 2 (52037009)- nos habla de sus experiencias con el escozul y de cómo se ha aplicado en su institución para el tratamiento alternativo del cáncer.