*ZVI MAZEL/LA RAZÓN.ES

¿Tiene Mursi ahora las manos libres con la remodelación de la cúpula militar?

–La jubilación de la Junta Militar por parte del presidente Mohamed Mursi era cuestión de tiempo. No iba a dejar pasar más de seis meses. Los Hermanos Musulmanes no comparten el poder. El objetivo es gobernar en solitario y acumular un poder absoluto para poner en marcha su agenda. La congregación cuenta con una importante red social e institucional, por lo que no creo que tenga ningún obstáculo que la impida llevar a cabo el plan. Tiene todo el poder en sus manos.

– ¿Por qué en este momento, en plena crisis en el Sinaí?

–Precisamente, el atentado del 5 de agosto, en el que mueren 16 guardas fronterizos, se convierte en una oportunidad de oro para impulsar los cambios en la cúpula militar. El ataque yihadista supone un fallo en la seguridad y Mursi aprovecha este momento de debilidad para golpear. Hace unos días sustituyó al jefe de los Servicios Secretos y ahora ha terminado los cambios con la expulsión del mariscal.

– ¿Acatará el Ejército egipcio los nuevos cambios?

–No pueden hacer nada. El general Tantaui no es el presidente sirio, Bachar al Asad, ni es Sadam Husein o Gadafi. Tantaui es consciente de que el sometimiento al poder civil es el futuro del Ejército egipcio. El mariscal facilitó la revolución que acabó con el régimen de Mubarak y después permitió la subida al poder de los Hermanos Musulmanes. Éste es el alto precio que ha pagado por ello. Si Tantaui tuviera ahora 50 años y estuviera rodeado de oficiales jóvenes dispuestos a luchar, quizás se podría contemplar la posibilidad de un golpe de Estado. Pero tiene 76, ha sido ministro de Defensa durante 21 años y ha gobernado el país durante el último año y medio en condiciones sumamente difíciles.

– ¿La destitución del general Tantaui pone punto y final a la batalla de poder entre los islamistas y los generales?

–Digamos que el Ejército se ha rendido. Hay un presidente electo y nadie tiene ahora más poder que él. Hay que recordar que los generales tardaron más de una semana hasta que anunciaron los resultados electorales. Todavía no se sabe con certeza qué sucedió. Teniendo en cuenta la fragilidad del sistema democrático egipcio, no estaría muy claro de quién era la victoria, si de Ahmed Safiq o de Mohamed Mursi. Fue el segundo y, de acuerdo con la Constitución, él tiene ahora todos los poderes. El cese de Tantaui era cuestión de tiempo.

– ¿El poder absoluto de los Hermanos Musulmanes aboca a Egipto hacia una deriva islamista?

–Sí. Los Hermanos Musulmanes llevan 80 años luchando para asumir el poder. No son un partido secular. El ideario de la congregación y de los yihadistas no está tan alejado entre sí. Es más, los yihadistas se inspiraron en la ideología de la Hermandad, que radicalizó las bases del Islam en el siglo XX. De esta fuente beben las organizaciones terroristas Al Qaeda o la Yihad Islámica. La diferencia es que los Hermanos Musulmanes han renunciado a la violencia en las últimas décadas, pero en sus orígenes cometieron numerosos atentados.

*Zvi Mazel.-Ex embajador israelí en Egipto