T.P.C.

Ante la reciente ola de antisemitismo en redes sociales de México, considero oportuno divulgar por este medio, un relato de hace tres años, que pretende crear conciencia del desarrollo lamentable de esta problemática que enfrentamos de nuevo.

La noche del 7 de enero de 2009, una asamblea de personas y organizaciones tomaron la decisión de formar el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Palestina (MMSP), en la que se acordó convocar de manera nacional a expresar el repudio al “genocidio que desarrolla el Estado israelí en contra del pueblo palestino”. Asumiéndose como un movimiento diverso y heterogéneo, emitieron la convocatoria al acto el sábado 10 de enero a las 12:00 hrs. sumándose a la Jornada global de Solidaridad con el pueblo palestino, con un recorrido que salió del Hemiciclo a Juárez con destino a la Embajada de Estados Unidos.

Curiosamente, ví pocos “palestinos” (ignoro el número de ellos en nuestro país). Predominó la asistencia de población mexicana y, de ésta, un número significativo de militantes del PT (Partido del Trabajo). Portaban banderas, pancartas, altavoces, mascadas árabes “tipo Arafat”, con las que varios cubrieron sus rostros para, de alguna manera, permanecer en el anonimato.

Entonces me presenté portando en mi espalda una bandera de Israel, en el frente una pancarta que decía: “Los ciudadanos de Gaza son víctimas de Hamas, no de Israel” y, una cartulina con el mensaje: “Antes de juzgar a Israel o de tomar partido, ¡Infórmate! Puedes buscar en GOOGLE y/o en YOUTUBE, con las palabras “Palestine” o “palestinians” (letreros que hice en inglés y en español).

Antes de iniciar la marcha, se acercaron a mí varios individuos insultándome, cuestionándome e impidiendo no sólo que fuera en el contingente, sino que mostrara mi opinión. Me dijeron que estaba en la marcha equivocada y que organizara mi propia marcha.

Un hombre me pidió que me retirara porque “estaba causando confusión”, lo que me hace pensar que parte de los asistentes ignoraban la postura del MMSP o lo que hacían ahí, o se incorporaron al contingente para manifestar su repudio al “imperialismo”, para sacar su propia frustración y odio, o con velados intereses políticos y partidistas personales. Y no deja de sorprenderme que, una persona (yo) los intimidara. Aclaro que me opongo al terrorismo mundial, a la injusticia y que me indignan la ignorancia y la manipulación.

Increíble que organizadores y militantes, con “supuestos” conocimientos políticos, con hambre y sed de justicia, no sólo hayan mostrado desconocimiento y falta de respeto por los Artículos Constitucionales 7º, 11º, 16º , 17º, 21º, 24º (y pretendido violar mis garantías individuales como ciudadana mexicana), sino contradecir la postura y fundamento de la creación del MMSP.

En su BLOG (mexicopalestina.wordpress.com) invitaban a que uno participe en el FORUM citando: “El forum es un espacio libre y plural de debate y para el intercambio de información. Para garantizar el derecho de todos a participar. No se permitirán, y serán eliminados sin previo aviso, los mensajes que contengan insultos, amenazas, calumnias, injurias o que inviten al odio, la violencia y/o provoquen la discriminación de cualquier tipo (ideología, religión o creencias, etnia, raza, origen nacional, sexo, orientación sexual, enfermedad, minusvalía o situación familiar…), así como los acosos sistemáticos a foreros, o los intentos premeditados de “reventar” un tema.”

Si se habla de justicia y solidaridad, pues debe aplicar en todos los niveles, me refiero, además del internet, en convocatorias, en debates, con los medios masivos de comunicación e invitar a un diálogo abierto y pacífico. Pero habiendo sido testigo de la gran intolerancia, no sólo fui agredida verbalmente, sino hubo individuos que intentaron impedir que continuara en la marcha e incluso quienes quisieron golpearme.

El MMSP distribuyó hojas en las que hacía las siguientes preguntas a un “JUDÍO SIONISTA” ( pero ellos daban las siguientes respuestas):

¿ Por qué dicen que Palestina es de ustedes ?
Porque Dios nos la regaló.

¿ Qué Dios ?
El que inventamos nosotros.

¿ Qué pruebas tienes para comprobarlo ?
Nuestros libros sagrados (Torá, Talmud). Los primeros cinco libros de la Biblia.

¿ Y quién escribió esos libros ?
Nosotros, por supuesto.

¿Por qué escribieron en esos libros que ustedes son el “Pueblo Elegido” de ese Dios que ustedes mismos inventaron ?

Porque no somos tan pendejos para escribir que otro pueblo iba a ser el Pueblo Elegido del Dios que inventamos.

Creo que olvidaban que el Judaísmo es la base del Cristianismo y del Islamismo. Más allá de los diversos textos religiosos, existen evidencias históricas, arqueológicas y científicas, por mencionar algunas, que se han realizado por investigadores de varios países, con creencias, conocimientos, estudios especializados y trasfondos múltiples.

Las televisoras dieron una nota diciendo que no hubo disturbios (será porque “no corrió sangre”, ni golpes), pero me consta que personas de la marcha lanzaron zapatos y bombas o algo con fuego hacia la Embajada de Estados Unidos y hacia los policías que se encontraban allí. Supongo se les olvidó mostrar la propaganda del MMSP, misma que me evoca a la de la agencia “Göebels”, durante el nazismo, con las caricaturas antisemitas. Y la agresión al mostrar en la bandera de Israel en lugar de la estrella de David, una suástica nazi (sin respeto alguno por aquellos que perecieron en los campos de concentración). Parece que querían reavivar este movimiento y generar más violencia o “disimular” el terrorismo y anti-semitismos propio, difundido con literatura tendenciosa como la de “Los protocolos de los sabios de Sión”

Durante el trayecto de la marcha, también hubo personas que se acercaron de manera respetuosa a preguntarme sobre el POR QUÉ de mi manta. Simplemente contesté que me indigna ver lo que la TV y algunos medios mostraban de Israel: una información limitada, manipulada y en ocasiones tendenciosa, ya que no se enseñaba el proceder de los grupos terroristas, que ilegalmente cavan túneles desde Egipto, para infiltrar armamento y a sus militantes en territorio israelí ; que los colocan debajo de mezquitas, escuelas, hospitales e incluso de viviendas de civiles inocentes, a quienes de alguna manera tienen secuestrados e intimidados. La niñez palestina no tiene derecho a una educación como cualquier otro infante del orbe, sino que los libros de texto actuales y hasta personajes de Walt Disney fomentan el terrorismo, el anti-semitismo y el odio a Israel. Se ha destruído una generación completa con ésta ideología, la cual promueve el “auto-suicidio” con el engaño de complacer a Alá y de ganar un sitio en el paraíso a su diestra. Incluso considero que ha ganado preeminencia el texto y propaganda terrorista, olvidándose del Corán mismo, de los derechos civiles y humanos, siendo cegados por un fanatismo religioso y político que no distingue edad, raza, religión ni profesión.

Bien dice el Nuevo Testamento que “Se ignoran las Escrituras y el poder de Dios” (Mateo 22:29) y el mandamiento: “No matarás” (Deut. 5:19). Es obvio que se desconocen los principios de fe del Judaísmo, entre los que se fomenta el amor a Dios, a la familia, al prójimo, al mundo, a la naturaleza, a los animales, el respeto a los muertos; a hacer el bien, a procurar la justicia y la paz (hecho que suena todavía imposible en el Medio Oriente, más cuando Israel es la única democracia).

Si un terrorista o delincuente viniera a matar a tus hijos o seres queridos, ¿no los defenderías? Amamos a los palestinos, al prójimo, más no al terrorismo y a sus tácticas cobardes, ilegales y contra civiles. En una guerra hay pérdidas humanas de ambos lados, se afecta la moral, el espíritu, lo material, la economía… Se destruye la esperanza, la paz.

El día anterior, hubo una manifestación en pro de Israel. Misma que se realizó de manera pacífica y segura. Con palabras del Excmo. Embajador Yosef Livne, del Rabino Marcelo Rittner y de otras personalidades de la comunidad judía mexicana. Se entonaron los himnos nacionales de México y de Israel. La convocatoria fue abierta y fue evidente el apoyo de la comunidad no judía. La población cristiana protestante, estudia la Palabra de Dios y tiene muy presente el orar por la paz de Jerusalén y amar al pueblo judío. Además de su constante interés por comprender el judaísmo, el Sionismo y lo que sucede en el Estado de Israel. Tolerancia, pluralidad, justicia, democracia, apertura, diálogo, es lo que existe y procura el pueblo judío, a pesar de la problemática del Medio Oriente y que ha enfrentado desde su creación en 1948.

Vaya, vaya… ¿El pueblo escogido?, pues los invito a formar parte del mismo, más ahora. Se ignora que Dios los escogió no por su superioridad (como se ha hecho creer), sino por su disposición a seguir los mandatos divinos. El pueblo judío, el más pequeño, y el más insignificante de todos. Es una responsabilidad y una carga. Se derrama sangre palestina, sangre judía, pero ¿quiénes estarían dispuestos a aceptar su rigidez y a ser parte también de su sufrimiento? ¿A ser víctima del anti-semitismo religioso, racial o científico; de un anti-judaismo o de una judeofobia? Se está consciente de que los judíos no son odiados por sus creencias, sino por lo que se cree que ellos son.

En todos los países ha habido intentos de exterminio; en México mismo, con nuestros queridos indios yaquis de Sonora. Pero ninguna matanza supera al Holocausto, donde mártires murieron por sus convicciones religiosas, sin importar su manera de observancia. Tiene relevancia y se distingue por ser el primer genocidio registrado, llevado a cabo por una nación occidental culta, industrializada en contra de sus propios ciudadanos y vecinos. Es el único ejemplo de una nación que estableció una tarea genocida por sí misma y el logro de la misma mediante un proceso de exterminio metódico y altamente técnico. En nivel industrial y el modo en que el Holocausto se realizó no tenía precedentes. Al judío mismo y al extranjero (a todo aquel que no perteneciera a la raza aria, superior a las demás) les pareció que Dios no existía, que estaba muerto o que había ocultado su cara de ésta situación tan abominable. ¿Dónde está su amor, misericordia y justicia?, se preguntaban las víctimas. ¿Por qué el mundo no actuó antes?

Una reflexión, cito al profeta Isaías: “Con todo eso, Dios quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando haya puesto su vida en expiación por el pecado, verá linaje, vivirá por largos días, y la voluntad de Dios será en su mano prosperada. Verá el fruto de la aflicción de su alma y quedará, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos. Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y con los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó despojos, por cuanto derramó su vida hasta la muerte, y fue contado con los pecadores, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado por los transgresores.” (Isaías 53: 10-12).

Nuevamente me cuestiono, ¿por qué ahora más que nunca éste deseo de guerra, violencia, de liquidar al Estado de Israel y al pueblo judío? ¿Por qué no hace más de 60 años, antes de la Guerra de los Seis Días, cuando el pueblo israelí decidió independizarse del régimen británico? Creo que no resultaba atractivo irse a vivir a un territorio árido, inhóspito, desdeñado. Mejor ahora, cuando ya todo está listo, próspero, competitivo… ¿Intereses políticos y económicos? ¡Sin lugar a duda! El mundo no entiende el vínculo tan fuerte que existe entre Israel y su tierra, entre Israel y su pueblo (Gén. 17:7-8 y Deut. 34:4). Ahí se implementarían todos los mandamientos de Dios y se harían realidad Sus bendiciones, algo que debían cumplir los judíos.

No es con espada, ni con ejército, sino con Su espíritu. Recordemos: “Pedid por la paz de Jerusalén. Sean prosperados los que te aman.” (Salmo 122:6) Sin lugar a duda, de todo hay en la viña del Señor. Debe fomentarse y practicarse la “libertad de expresión”, de manera objetiva, imparcial e informada. Tener “conocimiento de causa.”

Todo mi respeto y profundo agradecimiento a aquellas personas que quieren conocer y entender tanto a Israel como a Palestina, con claridad y separando al terrorismo. Gracias mil a aquellos que me protegieron durante la marcha, aún sin conocerme.

Son apreciados sus comentarios y su apoyo, por medio de ENLACE JUDIO.