CON INFORMACIÓN DE EL PAÍS

El embajador estadounidense en Libia, tras el ataque. / AFP

12 de septiembre 2012- El embajador estadounidense en Libia, Christopher Stevens y otros tres empleados de la misión diplomática han muerto tras sufrir un ataque este martes, 11 aniversario del 11-S, en la ciudad de Bengasi (en el este de Libia), según ha informado hoy miércoles el ministerio del Interior libio. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha posteriormente confirmado la muerte y condenado el ataque. El Gobierno libio ha pedido disculpas a Washington por lo ocurrido en Bengasi.

Un grupo de milicianos asaltó el edificio del consulado estadounidense en Bengasi y lo incendió en protesta por la emisión en la televisión de EE UU de una película sobre la vida de Mahoma que consideran blasfema. En el lugar se produjo un intenso enfrentamiento entre los asaltantes, dotados de armas de fuego y bombas caseras, y las fuerzas de seguridad que protegían el consulado.

Según las fuentes libias, Stevens fue alcanzado por el fuego de los atacantes cuando las fuerzas de seguridad estaban intentando trasladarle en coche del consulado a un lugar más seguro. Poco después, la sede estadounidense fue saqueada, de acuerdo con la versión de varios testigos, que han visto a un grupo de personas llevándose el mobiliario.

Bengasi fue el epicentro de la revuelta que posteriormente consiguió, con la ayuda de las fuerzas de la OTAN, derrocar al régimen de Muamar el Gadafi.

“Estados Unidos rechaza los esfuerzos para denigrar las creencias religiosas de otros, pero todos debemos oponernos, sin equívocos, al tipo de violencia insensata que quitó la vida a estos empleados públicos”, ha declarado Barack Obama, quien dio mandato a su Administración para elevar la seguridad de los diplomáticos.

Poco antes, en otra manifestación de protesta por el mismo asunto, varios jóvenes salafistas han asaltado los muros de la Embajada de EE UU en El Cairo, y han conseguido arrancar de un mástil la bandera de las barras y estrellas, reemplazándola, durante unos minutos, por la de Al Qaeda. Tras unos minutos de desconcierto, llegaron varias docenas de miembros de las fuerzas del orden y formaron un cordón alrededor de los muros del edificio.

Al inicio de la concentración, que no había sido anunciada con antelación en los medios, y que probablemente ha cogido por sorpresa a las autoridades, se han oído varias explosiones que parecían disparos. Sin embargo, fuentes de la Embajada estadounidense confirmaron que eran solo cohetes y petardos, y que no había ningún impacto de bala en la legación diplomática.

La manifestación había sido convocada el mismo martes por el predicador salafista Wessam Abdel-Wareth a través de su canal de televisión, Hekma. Otros grupos salafistas —una corriente ultraconservadora del Islam—, como representantes del partido Nur, y del movimiento Ahrar, formado por los seguidores del excandidato a la presidencia Hazem Abu Ismael, han difundido entre sus miembros la convocatoria.

Los Hermanos Musulmanes han convocado para este viernes otra manifestación de protesta contra los “insultos” al islam.