EL MUNDO.ES
11 de octubre 2012.-Al menos cuatro personas han muerto y decenas resultaron heridas este martes por los continuos bombardeos de las fuerzas del régimen en los últimos bastiones rebeldes en la capital siria Damasco, según declararon activistas sirios.
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Numerosos edificios fueron alcanzados por la artillería y los disparos de los helicópteros en el barrio Hajar al-Aswad. Según varios vídeos publicados en internet, los activistas mostraron agujeros en los edificios y escombros esparcidos en los callejones.
Hajar al-Aswad es el hogar de muchos sirios que huyeron de los Altos del Golán en 1967 durante la Guerra de los Seis Días con Israel y muchos de ellos han huido de la violencia de la capital para regresar a las aldeas cercanas a la frontera, a 35 kilómetros al suroeste.
El barrio es uno de los distritos que ha estado a la vanguardia de la revuelta contra el presidente Bashar Asad.
“Las operaciones rebeldes de Hajar al-Aswad habían cesado, pero hoy hemos visto el mayor bombardeo en el distrito en dos meses”, dijo el activista Abdallah Golán por teléfono desde el opositor Centro de Medios de Damasco.
Los bombardeos continuaron en el distrito sur de Tadamon, donde los rebeldes se habían retirado, y el suburbio meridional de Yalda, según anunciaron otros grupos de la oposición.
Las fuerzas gubernamentales, apoyadas por blindados, artillería y fuerza aérea, han atacado una docena de distritos en las afueras de Damasco, en una campaña para sofocar la rebelión en la capital.
Activistas y residentes dicen que los ataques han matado al menos a 2.000 personas en los últimos dos meses y muchos fueron ejecutados sumariamente después de que tropas del Gobierno hicieran incursiones en los barrios residenciales tras los bombardeos aéreos.
