INFOBAE.COM

La casa Alexander Historical Auctions planea vender la colección el 27 de septiembre en Stamford y dice que los documentos podrían brindar un entendimiento histórico y psicológico invaluable.

“Recapitula los años formativos del número dos del Tercer Reich, quien era responsable de motivar a las masas alemanas para respaldar a Hitler”, comentó Bill Panagopulos, presidente de la compañía. “En mi opinión -agregó-, muestra cómo este simple estudiante universitario, tímido y enamorado, se radicalizó”.

Las miles de páginas incluyen una ponencia universitaria de Goebbels, tarjetas de reportes, decenas de poemas, ensayos escolares y cartas de familiares, amigos y novias. “En verdad te da una idea de lo que pasaba por su cabeza”, dijo Panagopulos. “Hay mucha información si alguien quiere escudriñar en la mente de este hombre que se convirtió en un lunático”.

En un indicio temprano de su ego, Goebbels firmó algunos de sus materiales con varias rúbricas. Hacia los años postreros de la colección, comenzó a mostrar tendencias antisemitas, dijo Panagopulos. Agregó que la casa subastadora sólo ha traducido un 10% de los documentos y que tuvo dificultades para descifrar la escritura.

La venta generó la inquietud del líder de un grupo de sobrevivientes del Holocausto, que criticaron a la casa de subastas por vender el año pasado bitácoras escritas por el médico de los campamentos de concentración nazis Josef Mengele.

“Alexander Auction House está lucrando con la venta de artefactos y memorabilia nazi”, protestó Menachem Rosensaft, vicepresidente de la American Gathering of Jewish Holocaust Survivors and Their Descendants (Asamblea Estadounidense de Sobrevivientes del Holocausto Judío y sus Descendientes), aunque reconoció que tienen el derecho legal de hacerlo.

Rosensaft agregó que tales materiales pertenecen a un archivo para que los estudien historiadores y que le preocupaba que los documentos puedan usarse como relicarios del líder nazi.

Panagopulos, de su lado, aclaró que los museos dependen con frecuencia de donaciones de personas que compran objetos en subastas y que los neonazis no coleccionan el material.

Se prevé que la colección, que abarca el periodo previo a que Goebbels se uniera al partido Nacional Socialista en 1924, se venda en más de 200 mil dólares.