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24 de septiembre 2012.-El grupo antislámico británico de la Liga de Defensa Inglesa (EDL, por sus siglas en inglés) de tendencias de extrema derecha, está empleando tácticas sofisticadas para atraer el apoyo de religiones que tienen algún “malestar contra los musulmanes”, reveló el lunes el diario británico The Huffington Post.
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La EDL explota las tensiones entre religiones para reclutar a cristianos extremistas, judíos, hindúes y sijes, al difundir propaganda antimusulmana, afirmó la publicación.
Para lograr el objetivo propuesto, la EDL ha establecido estrechos vínculos con grupos religiosos nacionalistas en el exterior, entre ellos la Liga de Defensa Judía (JDL, por sus siglas en inglés), un grupo judío considerado terrorista por la policía federal estadounidense (FBI), un grupo nacionalista de tendencias neo-Nazi hindú que opera en la India y otros grupos militantes cristianos.
“La EDL intenta representar su causa en términos religiosos, y busca agregar un sentido de relevancia cósmica al retratar una supuesta guerra que se está llevando a cabo entre la civilización occidental y el Islam, y en un sentido aún más amplio (una guerra) entre el bien y el mal”, adelantó el informe.
El grupo ha desarrollado vínculos con el grupo extremista Christian Action Network (CAN, por sus siglas en inglés), un grupo islamófobo estadounidense fundado con el “propósito de proteger el patrimonio religioso y moral de EE.UU. a través de esfuerzos educacionales”.
El grupo además se ha aprovechado de las tensiones en Oriente Medio para reclutar a judíos británicos, al aprovecharse de los sentimientos antislámicos surgidos en tales comunidades.
“Los sionistas de tendencias de línea dura, consideran la alianza como una oportunidad para disminuir la presencia e influencia musulmana en EE.UU. y Europa, que perciben como un detrimento del régimen israelí”, indica el texto.
En el informe se recomendó la creación de “Festivales de Religión” a nivel local y nacional, así como mecanismos de vigilancia interreligiosos para protestar contra las movilizaciones de la EDL en sus pueblos y ciudades, y la formación de grupos entre las distintas religiones para combatir la EDL.
Mientras tanto, los líderes religiosos británicos han condenado la nueva táctica de reclutamiento de la EDL.
