MARCOS KOGAN/COMUNIDAD ISRAELITA DEL PRINCIPADO DE ASTURIAS

Nací milenios antes de que fuera rebautizada Palestina por los conquistadores romanos, y antes de que los británicos decidieran entregar mis tierras orientales a Jordania. Mi gente, los judíos, mantuvieron comunidades aquí durante tres mil años, esto es, hasta que los árabes decidieron masacrar a los judíos en 1920 (disturbios de Nabi Musa) y 1929 (masacre de Hebrón). Cientos de civiles fueron asesinados, la mayoría de ellos mujeres y niños. Mientras tanto, sus estados árabes hermanos, exiliaron a 1.000.000 de judíos árabes. Borrando su Historia.

Yo soy Israel – He sido atacado cuatro veces en 60 años, por cinco ejércitos árabes. Soy un sobreviviente, y gané todas las guerras que libraron contra mí. Les dije a los árabes que vivían en mi tierra, que eran bienvenidos a quedarse, pero sus hermanos dijeron, “emigren temporalmente mientras nos ocupamos de los judíos”. He estado ofreciendo un mensaje de paz desde el día en que nací. Pero mis enemigos, sólo respondieron con bombas, balas y sangre – la nuestra y la de ellos.

Al darse cuenta de que no podían derrotarme con las armas, mis enemigos se volcaron hacia las mentiras.

Yo soy Israel una y otra vez mi nombre es difamado. Aunque, como el engaño de Muhamad Al-Dura, cada mentira es finalmente desvirtuada. Mis enemigos siguen afirmando que estoy cometiendo “genocidio”. Díganme, ¿Es “genocidio” dar oportunidades de educación a los árabes palestinos? 20% de los estudiantes, en la Universidad de Haifa, son árabes. Si exilié a todos los árabes en 1948, ¿Por qué el 20% de mis ciudadanos son árabes que votan? ¿Por qué renuncié a toda la península de Sinaí y a la Franja de Gaza, desarraigando a mi propia gente de sus hogares, sólo por la esperanza de paz?

Yo soy Israel – en las operaciones de combate, arriesgo la vida de mis adolescentes para reducir al mínimo las bajas civiles. Hago todo lo posible para hacer blanco sólo a combatientes, a menudo poniendo a mis soldados en peligro. En la guerra, lanzo panfletos sobre las áreas a ser atacadas, advirtiendo a los civiles para que evacuen – ¿Cualquier otro ejército en la historia de la humanidad ha hecho esto por su enemigo?

Esperé 8 años para detener los diarios ataques con cohetes de Hamas, algunos cayeron en mis jardines de infantes. Soy paciente, pero mi paciencia no es infinita.

Yo soy Israel – descubrí nuevos medicamentos para tratar devastadoras enfermedades. He desarrollado la tecnología para la creación de Intel, de anti-virus, y de teléfonos celulares. Y estoy a la cabeza del mundo en publicaciones científicas, per capita.

Envío misiones humanitarias a los países en desarrollo, incluidos países musulmanes. He absorbido a cientos de refugiados musulmanes que enfrentaron genocidio en Darfur refugiados que ningún Estado musulmán tomaría.

Yo soy Israel – uno de los países más pequeños del mundo y, probablemente, el más obstinado – Me niego a renunciar a la esperanza de paz. Mis amigos me apoyan, no por cualquier lobby, sino porque ven la verdad. Soy el corazón de Oriente Medio, y la esperanza para su futuro.

Mi profeta dijo: “No alzará la espada pueblo contra pueblo”, y voy a intentar…

E intentar…

E intentar, hasta que esas palabras sean verdaderas.

Porque, yo soy Israel.