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09 de diciembre 2012.-El líder de Hamás, Jaled Meshal, destacó hoy en Gaza la necesidad de una “auténtica reconciliación” con Al Fatah que ponga fin a años de enfrentamientos entre las dos grandes facciones palestinas.

“Estoy en contacto directo y coordinación con el presidente (palestino y líder de Al Fatah, Mahmud) Abás y con los (mediadores) egipcios para culminar una auténtica reconciliación”, dijo Meshal en un encuentro con representantes de los distintos movimientos palestinos en el tercer día de su histórica visita a la franja.

Tras entrevistarse con dirigentes de Al Fatah y de las facciones de inspiración marxista de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Meshal destacó la atmósfera “positiva” que ha encontrado en favor de un acuerdo de reconciliación.

“Las diferencias políticas son un derecho legítimo, pero la división política es rechazable”, añadió.

Meshal recalcó que Hamás apuesta por “una autoridad, un Gobierno y un Parlamento”, que reemplacen a la vigente situación de doble ejecutivo: uno en Gaza en manos de su movimiento y otro en Cisjordania vertebrado por Al Fatah.

También Al Fatah mostró hoy su disposición a pasar la página de la división, que se ha convertido en prioridad desde la ofensiva israelí en Gaza del mes pasado.

Faisal Abu Shahla, diputado de Al Fatah, señaló a los periodistas que su movimiento “está interesado ahora más que nunca en una auténtica reconciliación sobre el terreno”.

“Estamos diciendo a Hamás ‘venid, vamos a acabar con la división porque somos socios’. Nosotros nos sumamos a la victoria de Hamás en la última guerra en Gaza y Hamás apoyó al presidente Abás en la apuesta por el reconocimiento en Naciones Unidas”, resumió.

Meshal tiene previsto concluir mañana su estancia en Gaza, donde llegó el viernes y lloró al besar tierra palestina por primera vez desde que era niño, cuando su familia se convirtió en refugiada en la Guerra de los Seis Días de 1967.

Ayer, en un discurso con motivo del 25 aniversario de Hamás, Meshal abogó por “liberar toda Palestina” y “no ceder un milímetro desde el río Jordán hasta el Mediterráneo”, lo que incluye el Estado de Israel.