AJN

05 de enero 2013.-En una entrevista televisiva de 2010, recientemente traducida por el Instituto de Investigación de los Medios de Oriente Medio (MEMRI, por su sigla en inglés), el actual presidente egipcio, Mohamed Morsi, consideró que las negociaciones de paz palestino-israelíes eran “una pérdida de tiempo y de oportunidades” y se refirió a los judíos como “sanguijuelas” y “descendientes de monos y cerdos”.

En la nota con Al-Quds TV, del Líbano, el 23 de septiembre el hoy mandatario descalificó a la Autoridad Palestina por ser una creación de “los enemigos sionistas y estadounidenses con el único propósito de oponerse a la voluntad del pueblo palestino”, razón por la cual “ninguna persona razonable puede esperar algún progreso por esta senda”.

En cambio, Morsi pidió a los árabes y a los musulmanes de todo el mundo “emplear todas las formas de resistencia”, de modo que los judíos “no tengan oportunidad alguna de estar en cualquier tierra árabe o islámica”.

En otra entrevista, emitida por el mismo canal el 20 de marzo de ese año, el actual presidente egipcio instó al mundo islámico a “enfrentar a esta entidad sionista”, cortar “todos los vínculos” con ella, incluyendo un boicot total de Israel, y evitar la “normalización de relaciones”.

El mundo árabe-islámico “desea un país en toda la tierra de Palestina” y “toda conversación sobre una solución de dos Estados y sobre la paz no es más que una ilusión”, concluyó Morsi, para quien los judíos “son hostiles por naturaleza” y “los sionistas no entendían otra cosa que no fuera el lenguaje de la fuerza”.