PROYECTO HORIZONTE EN EXCLUSIVA PARA ENLACE JUDÍO
La persona autosuficiente es aquella que tiene la capacidad para tomar decisiones y comportarse de acuerdo con lo que considera correcto y apropiado. Puede resolver los problemas que se le presenten por sí solo, o recurrir a pedir ayuda u orientación. Las herramientas que podemos proporcionarles son confianza, competencia y responsabilidad.
¡Ayúdalos a manejar su independencia!
Utiliza mensajes positivos en lugar de agredirlo con formas que lo asustan y le infunden temor.
Confía en sus capacidades y habilidades y ayúdales a desarrollarlas.
No lo llames con apodos o adjetivos que lo descalifiquen (“eres un tonto”, “nunca te fijas”, etc.).
Dale la oportunidad de que se haga responsable de sus cosas y permite que se sienta siempre útil.
Hazle sentir que confías en él y disfruten juntos la satisfacción de elogiar sus logros y esfuerzos.
Responde a sus necesidades y bríndale seguridad en sí mismo.
Sé paciente y tolerante; no le des demasiadas instrucciones ni hagas las cosas por él.
Enséñale a tener la capacidad de ser competente para que tenga ánimos de emprender.
La sobreprotección es uno de los elementos que obstaculiza la independencia, la autosuficiencia y la responsabilidad.
Consiste en resolver los problemas de los hijos por temor a que sufran o se lastimen y lleva a hacer niños dependientes y poco resistentes a las adversidades. Los padres sobreprotectores les quitan a sus hijos la posibilidad de valerse por sí mismos y de resolver situaciones que no atañen a nadie más que a ellos.
Nuestra tarea es continuar reforzando su nutrición emocional, que favorece el respeto, comunicación, autoestima y firmeza. Así podrán crear valores y habilidades que llevarán consigo para el resto de su vida y les permitirá a nuestros hijos forjar un camino autónomo e independiente.
