BENJAMIN LAUREANO LUNA PARA ENLACE JUDIO

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Antes de que Benjamín Netanyahu, Primer Ministro de Israel, saliera hacia Moscú, el 14 de mayo, Eugueni Satanovski, Jefe del Instituto Ruso para Oriente Próximo, declaró en Moscú un día antes, que si Israel no quiere que Rusia venda a Siria el sistema de misiles antiaéreos S-300 PT, debe permitir que el Puerto de Haifa se convierta en base naval para la Flota Rusa.

Esta indignante exigencia cínica, puso al descubierto, que Rusia está inmiscuido en la presión nuclear iraní, las matanzas del dictador sirio en contra de su Pueblo, las guerrillas terroristas de Líbano y de Gaza, para someter a Israel. Al escribir sobre las fuentes gasíferas de Israel en el Mediterráneo, informamos sobre las exigencias rusas para apoderarse de los hidrocarburos israelíes.

La Comunidad Judía Mundial respalda a Israel en su desarrollo, a salvaguardar su Independencia y Soberanía.

El Frente Internacional de Derechos Humanos rechaza las exigencias colonialistas, expresadas el día 13 de mayo en Moscú, por el Jefe del Instituto Ruso para el Oriente Próximo, contraria a la Autodeterminación del Pueblo de Israel, a la Convivencia Pacífica, al principio de No Intervención, Respeto a la Soberanía e Independencia Israelí y es un reclamo terrorista, porque impone la condición: Si desea Israel que no entregue Rusia a Siria el sistema S-300, debe aceptar a cambio, que en Haifa se instale una base naval rusa, para poder amenazar a Europa y Africa desde el Mediteráneo.

El sistema de misiles S-300, puede derribar a un avión israelí a 150 kilómetros; simultaneamente sigue 12 objetivos diferentes y puede atacar simultaneamente 6 objetivos; se despliega en 5 minutos; almacena 48 misiles. Este sistema está instalado en Rusia desde 1978. Lo posee China, Kasajstan, Bielorusia, Ucrania, Elovaquia, Bulgaria y Grecia.

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Israel puede neutralizar su funcionamiento mediante un gusano cibernético.