PROYECTO HORIZONTE PARA ENLACE JUDÍO
Reconoce que las cosas materiales no te hacen mejor o peor persona, y si no te alcanza, no lo compres. Primero analiza tus posibilidades económicas.
Si percibes que tus gastos superan tus ingresos y las deudas crecen cada día más, tal vez no has aprendido a vivir dentro de tus posibilidades económicas y, por el contrario, estás gastando más del dinero que ganas.
¿Por qué gastas más cuando sabes que no tienes el dinero para pagar?
Hay quienes se escudan bajo el precepto de que el salario recibido mensualmente no es suficiente para cubrir sus gastos, viéndose obligado a recurrir a préstamos y tarjetas de crédito. Sin embargo, en ciertas ocasiones la razón obedece a que se gasta de más, no por necesidad, ni por malos cálculos matemáticos, sino por razones emocionales que no siempre se reconocen.
Por esta razón, es necesario identificar cuáles son tus necesidades básicas y tener en cuenta estos cinco consejos, para que puedas hacer rendir mejor tu salario:
1. Saber exactamente cuánto ganas.- Si quieres vivir dentro de tus posibilidades, primero debes estar consciente sobre cuáles son las deudas que tienes y cuáles están al alcance de cubrir.
2. Gasta menos de lo que ganas.- Reducir tus gastos a través de un presupuesto que te permita visualizar cómo distribuir el dinero cada mes y en qué rubros puedes hacer recortes.
3. Evita excederte con las tarjetas de crédito.- Si consideras que la tarjeta de crédito es parte de tus ingresos… ¡estás equivocado! Este producto financiero no es dinero extra, sino un financiamiento que si no le das un buen manejo, te puede salir muy caro a corto plazo.
4. Resiste la presión-. Si tus amigos o familiares ganan y gastan más que tú, puedes caer en tentaciones que te pueden llevar a hacer grandes gastos. Por lo tanto, evita comparaciones.
5. Guarda un fondo de emergencia-. Un dinero extra para gastar en caso de emergencia, te permitirá no recurrir a préstamos, ni tarjetas de crédito, logrando mantener un estilo de vida equilibrado alejado de las deudas.
Es mejor…
– Vivir una vida cómoda y evitar el despilfarro.
– No gastar o endeudarse sólo para impresionar a los demás.
– No engañarse pensando que la riqueza está en los objetos materiales.
– Aprende a manejar el dinero, para que el dinero no te maneje.
