Helen Thomas, la periodista controversial y enemiga de Israel, ha muerto a los 92 años. Estaba siendo tratada por la enfermedad renal.

La carrera de Thomas, quien cubrió la política estadounidense, abarcó siete décadas, y su presentación de informes desde la sala de prensa de la Casa Blanca para la agencia de noticias UPI a menudo fue conflictiva, enfrentándola a los nueve presidentes en oficio, desde John F. Kennedy Jr. hasta George W. Bush.

Ella creció en Kentucky y Detroit, en una familia de nueve hijos de padres que emigraron del Líbano. La ascendencia árabe de Thomas y su cobertura tendenciosa del conflicto palestino-israelí alimentaron acusaciones persistentes de un sesgo anti-Israel.

Esas sospechas fueron justificadas cuando, en 2010, fue grabada pidiendo a los judíos retirarse de Israel y “volver a Polonia” y los otros lugares de Europa del Este de los cuales sus antepasados ​​habían emigrado – o huido.

Esa diatriba fue el final de su carrera, pues la obligó a retirarse de Hearst Newspapers, frente a una ola de condena. Fue una triste manera de terminar una carrera, y la manera como será recordada por el mundo judío.