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BENJAMÍN LAUREANO LUNA PARA ENLACE JUDÍO

Enlace Judío México | Benjamín Netanyahu, Primer ministro de Israel y diversos Miembros del Congreso, entre ellos Bob Menéndez, Presidente de la Comisión de Relaciones del Senado, se oponen a disminuir la presión en contra de Irán para obligarle a desmantelar sus amenazadoras instalaciones militares.

Mientras, la Casa Blanca hizo saber a los legisladores que no legislen implantando nuevas sanciones en contra de Irán, porque eso saboteará los esfuerzos diplomáticos para llegar a un acuerdo con Teherán y el fracaso puede conducir a la alternativa militar.

Netanyahu habló ante la Knéset, en donde dijo que el actual mal acuerdo del Grupo 5+1 con Irán conducirá a la guerra.

Agregó que es falso que sólo existan dos posibilidades con Irán explicando que hay una tercera posibilidad: “Continuar la presión con las sanciones económicas para obligar a Teherán a aceptar el desmantelamiento de sus instalaciones nucleares. Por el contrario, un mal acuerdo conducirá a la guerra”. (Sobre este asunto, por nuestra parte recordamos el mal acuerdo que en Munich obtuvo el Primer Ministro Chamberlain en su negociación con Hitler, sacrificando a Checoslovaquia. Meses después estalló la Segunda Guerra Mundial.)

Irán busca suavizar las presiones a cambio de un ofrecimiento para llegar a un acuerdo, sin desmantelar sus instalaciones nucleares. Este es el mal acuerdo que rechazó abiertamente Netanyahu, el 8 de noviembre de 2013, en el aeropuerto “Ben Gurión” de Tel Aviv, en donde se entrevistó con el Secretario de Estado, John Kerry, de paso hacia Ginebra. La escena fue violenta.

Días después, el periódico The New York Times (vocero de la Casa Blanca ) calificó de “oposición histérica” la reacción de Netanyahu. Pero en Ginebra, el Canciller de Francia, Fabius, también se opuso al proyectado acuerdo y la conferencia fracasó. John Kerry, de visita en el Golfo Pérsico, aclaró, que el fracaso se debió a que Irán rechazó el proyecto de acuerdo que el Grupo 5+1 le presentó.

Londres y Teherán, acordaron el 8 de octubre, por su cuenta, volver a tener relaciones diplomáticas, nombrando cada uno a un Encargado de Negocios: Inglaterra nombró a Ajay Sharma, designado Encargado de Negocios no residente, que despachará en Londres y en ocasiones visitará Irán. Las relaciones se rompieron a causa de que el 29 de noviembre de 2011, un grupo de estudiantes islamistas asaltó las instalaciones de la Embajada Británica en Teherán. Ahora, al régimen de los ayatolas lo que le importa es volver a establecer relaciones con occidente, incluso relaciones precarias. Con ello trata de disminuir las presiones que sufren los persas.

Las presiones han originado un declive económico de Irán, país que gastó su gigantesca fortuna en petrodólares, adquiriendo armas de toda clase que Moscú le vendió, incluso las instalaciones nucleares persas las construyó Rusia.

Dos hermanos millonarios de Nueva York, enemigos de la ley de Salud del Presidente Obama, financian al fascista Tea Party, agrupamiento político que milita en el Partido Republicano, el cual no aprobó en la Cámara de Representantes el Presupuesto del Gobierno Federal, exigiendo los republicanos que no entrara en vigor la ley de salud –conocida como Obamacare-, presión ante la cual el Presidente Obama no cedió y, durante 15 días el Gobierno estuvo cerrado, poniéndolo en peligro de no poder pagar sus deudas, pero la fracción republicana en el Senado cedió y transitoriamente habrá dinero por unos meses, corriendo el peligro el gobierno de volver a ser cerrado por falta de presupuesto.

A lo anterior, se agrega la gigantesca deuda de Washington con Pekín. Ahora se ha sumado la protesta de Israel, la cual es apoyada por congresistas demócratas y republicanos. El Obamacare o sistema de salud, no ha funcionado correctamente por “errores” o sabotaje. Las denuncias por espionaje en contra de gobiernos aliados efectuado por EE.UU., creó un ámbito popular de desconfianza. Una encuesta acerca de la popularidad del Presidente Obama lo ubicó en un 39% .

Sólo un gobierno estadounidense fuerte podrá conducir exitosamente las negociaciones de Ginebra para lograr que Irán desmantele sus instalaciones nucleares. El nuevo Presidente de Irán, Hassán Rohani, a pesar de su aureola de pacifista, declaró que no está dispuesto a desmantelar sus instalaciones.

Es necesaria una nueva orientación diplomática occidental. Un reagrupamiento occidental en el que participe armoniosamente Israel, Saudi Arabia y los Estados del Golfo Pérsico. Con el respaldo unificado habrá éxito en las negociaciones de Ginebra, que deben reanudarse el 20 de noviembre, a la que no acudirán los diplomáticos, sino los técnicos.