Enlace Judío México | 30 de diciembre 2013.- La noticia se supo a la vez en Ciudad del Vaticano y Jerusalén. La diplomacia vaticana filtró el viaje del papa Francisco a Israel. Se celebrará en mayo de 2014. Hubo interés en precipitar el anuncio antes de la visita de Benjamín Netanyahu.
En la audiencia a Simón Peres, el presidente de Israel se lo sugirió. Rápidamente Francisco comprendió el mensaje y lo aceptó. Su visita será un broche de oro en el final del mandato de Peres por quien el Papa siente simpatía personal y profundo aprecio a su figura. Francisco se convertiría así en el cuarto Papa en visitar Israel, después de Pablo VI (1964), Juan Pablo II (2000) y Benedicto XVI (2009).
También puede interesarte
En la agenda del Papa en 2014 habrá otra fecha importante. Durante la audiencia a Vladimir Putin, Francisco consiguió también que no hubiera obstáculos para su encuentro con Kiril, el patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa (IOR). Francisco sabe además que uno de los objetivos del papa emérito, Benedicto XVI, era el de profundizar en las relaciones con la Iglesia Ortodoxa.
Sobre el viaje a Israel ya se sabe que se contemplan las fechas de finales del mes de mayo y que el Papa hizo llegar a Peres su deseo de que su visita tuviera la misma relevancia en sus contactos oficiales con Israel por un lado y con la Autoridad Nacional Palestina por otro.
En su viaje a Israel, Francisco quiere mostrar su cercanía al pueblo judío, su apoyo al proceso de paz, y su deseo de convertirse en un humilde peregrino que, como Papa, quiere llegar a Tierra Santa. Lo hará en una fecha muy especial al cumplirse la cinco décadas de la visita de Pablo VI. En los objetivos políticos de Francisco -un jesuita que nunca deja de dar la última puntada-, quiere convertir también esta visita en homenaje a los siete años de la presidencia de Simón Peres que culmina su vida pública.
Según indicaron fuentes vaticanistas a Hechos de Hoy, sus mensajes en Israel serán similares a los de su audiencia a Vladimir Putin. Desea una solución diplomática a los conflictos en Oriente Medio -especialmente en la guerra civil siria- y protección a las minorías cristianas en toda la región. También se quiere que se tenga muy presente que El Vaticano y la Rusia de Putin pusieron en pie un eje geopolítico para evitar una intervención militar en Siria. Francisco no sólo es el Papa que llegó del fin del mundo sino un jesuita en pie de guerra con la Curia -por muy crudo que suene- y el pontífice que compartió el triunfo con Putin en las horas que el mundo estuvo en vilo por Oriente Medio.
Buenos mensaje por tanto para Netanyahu, con un talante muy distinto al de Peres. Pero todo esto Francisco, que es un Papa de armas tomar, lo sabe bien al igual que tiene muy presente que sus críticos están en su propio caladero porque nunca se empleó mejor el dicho de ser mas papista que el Papa. Pero Francisco, que calza zapatones negros -de zancada larga- y cartera para llevar sus documentos bien gastada, como lució en su viaje a Brasil, tiene las espaldas bien anchas y fuertes.
Fuente:hechosdehoy.com
