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Enlace Judío México | Por segundo año, los pasajeros que abordan el nuevo tren ligero de Jerusalén el segundo domingo de enero, han tenido una sorpresa inusual: ver a sus compañeros quitarse los pantalones y viajar solo con su ropa interior.

El lunes por la tarde, cerca de 50 personas participaron y dejaron caer sus ropas, el doble de participantes que el año pasado, dijo el organizador Boaz Balachsan, un artista de Jerusalén.

“Fue muy divertido. No solo para los que participaron: en una ciudad conocida por sus refugios y comunidades conservadoras, muchos pasajeros respondieron de manera positiva”, destacó.

“Las reacciones fueron fabulosas. A excepción de una mujer probablemente inestable que gritó a una de las chicas, la gente reaccionó muy bien. Se rieron y nos preguntaron qué estábamos haciendo”, agregó.

Los pasajeros sin pantalones inventaron explicaciones creativas para su código de vestimenta. “Uno de los chicos dijo que había olvidado sus pantalones, otro expresó que estaba conscientizando a la gente sobre el cáncer de trasero. Incluso otro dijo que escuchó a dos chicas hablando entre ellas y adivinando que era una protesta por el aumento del precio de la ropa”, destacó Balchsan entre risas.

El Día Sin Pantalones se remonta a 1986 cuando un residente de Nueva York subió a un subterráneo sin pantalones, por accidente. Desde entonces los viajes de este tipo se han convertido en una tradición anual en el mundo. Sin embargo hay una condición: no se puede celebrar sin un sistema subterráneo o ferrovías, entonces hasta hace poco tampoco podía hacerse en Jerusalem.

“Lo he estado haciendo por años. Lo hice varias veces en el exterior, en Europa. Pero he estado esperando poder organizarlo en Israel. Ni bien terminé mis estudios decidí que era el momento. El año pasado fue el primer año y lo hice solo. Este año tuve más ayuda. De hecho tenemos un grupo que lo organiza, Improv Israel”, dijo Balchsan.

Cuando se le preguntó acerca de cómo habían reaccionado los pasajeros religiosos él dijo: “Creo que la gente subestima a Jerusalem. Tengo muchos amigos que pertenecen a sectores religiosos y otros, pero las personas son geniales, entienden lo que es y les da gracia. Saben que no andamos así todos los días”, dijo.

Fuente:prensajudia.com