ELENA BIALOSTOCKY PARA ENLACE JUDÍO
Enlace Judío México | Nuestros dirigentes trabajan de tiempo completo al servicio de la Comunidad: sacrifican un valioso tiempo que muchas veces quitan a su familia. ¿Y sus esposas? Ellas se encuentran no detrás del dirigente, sino a su lado, apoyando, aconsejando y compartiendo sus múltiples actividades.
Enlace Judío entrevistó a las esposas de los Presidentes de las diferentes Comunidades.
¿Cómo es la vida de un Presidente?
Sandra Feldman, esposa del Presidente de la Kehila: “La vida de un presidente, en cuanto toma el cargo, cambia bastante, porque es un cargo de mucha responsabilidad y de alguna manera influye en la vida de la gente de la comunidad y también influye en el tiempo, parte de la persona queda en esto, es algo que se hace de forma voluntaria, con gusto, con pasión, con corazón. Creo que todo eso tiene un peso muy importante, no es sólo la responsabilidad, sino dejar parte de tu vida ahí”
¿Cómo es tu vida familiar como esposa del Presidente de una Comunidad?
Paulette Shidlow, esposa de Jack, presidente de la Comunidad Bet El: “Ahora mucho más tranquila, porque cuando fue presidente del Ejecutivo, teníamos a los niños chicos, ahora los hijos no están en casa, entonces le puedo ayudar y yo también dedicarme a algunas actividades.
¿Cómo es tu vida social?
Vivian Metta, esposa de Marcos Metta, Presidente de la Comunidad Monte Sinaí: “No es más intensa que antes, son pocos los eventos a los que tengo que ir, digamos, como esposa del presidente, y el resto son actividades que tenemos ya muchos años participando. No necesariamente porque Marcos haya estado tomando puestos o yo esté en puestos, sino porque nos parece que es una oferta muy grande y muy variada de actividades que hay, principalmente dentro de la comunidad. Siempre nos ha gustado participar”.
¿Qué cambios ha habido desde que tu esposo es presidente?
Patty Cherem, esposa de Eduardo Cherem, Comunidad Maguen David: “Ha habido muchísimos cambios, los más significativos son el tiempo que le tiene que dedicar, los compromisos sociales y comunitarios. Lo que está padrísimo es la retroalimentación que nos dá la gente a él y a mí, los logros y proyectos”.
¿Qué tanto se han involucrado tus hijos en la vida comunitaria?
Inés Beja, esposa de David Beja, Presidente de la Comunidad Sefaradí: “Muchísimo, porque lo que hemos dicho día a día, sentados en la mesa, el estar platicando de las cosas comunitarias, es qué les gustaría, ellos están en la escuela, están involucrados y nos escuchan mucho. En ocasiones les pido su opinión, qué les gustaría o qué harían”.
¿Asistes a todos los eventos que se organizan en la comunidad?
Vivian Metta: “No es posible ir a todos, además, yo no creo que tengamos que asistir a fuerza, creo que hay que asistir con gusto. Por lo general trato de ir a la mayoría, pero tengo otras cosas que hacer y por otro lado hay que tener un equilibrio y siento que cuando es excesivo, es cuando puede llegar el momento en que diga ya me saturé, son tres años. Es muy importante que siempre haya todo el tiempo estas ganas por participar, en los que siento que quepo, en los que quiero ir, en los que siento que es importante asistir, que para Marcos es importante que lo acompañe, estoy al 100%, generalmente voy y lo hago con mucho placer”.
¿Qué le recomendarías a las esposas de personajes públicos para que su vida social, familiar y comunitaria esté integrada?
Sandra Feldman: ”De alguna manera, yo creo que el hecho de estar casada con alguien que hace este trabajo voluntario implica pensar que muchas de las horas que podría pasar con la familia va a estar haciendo otro tipo de trabajo o en otros eventos. Finalmente, es un ejemplo para la familia, para los hijos. De ninguna manera lo veo como tiempo perdido, es tiempo ganado. Ese ejemplo no se puede dar de otra manera, a pesar de que se dedica muchas horas a este tipo de trabajo, el tiempo que está con la familia es de calidad”.
