AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

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A 14 años de la ratificación del Tratado de Libre Comercio México-Israel, el comercio entre ambos países representa el 0.06% del total de lo que intercambió nuestro país en 2013. Pese a las cifras, varios son los proyectos que desarrollan conjuntamente empresas mexicanas e israelíes.

Por ejemplo, los sistemas de riego por goteo que se desarrollaron en Israel ya se ocupan en estados del país como Durango, Tabasco, Querétaro, Hidalgo y San Luis Potosí, por firmas especializadas en granos u hortalizas que crecen por este sistema, como Netafim.

Actualmente, empresas israelíes junto con productores privados de Oaxaca y Tabasco y representantes de los gobiernos de esos estados estudian un proyecto por el cual se sembrarán árboles de Teca —utilizados en la fabricación de veleros y yates— en territorio mexicano, que con tecnología de Israel crecerán en cuatro años y no en 18 años, para que en 2019 se exporten al mundo, aseguró en entrevista con EL UNIVERSAL el presidente de la Cámara de Comercio México-Israel Meny Samra Cohen.

Ello se debe que en cinco años más se abrirá la oportunidad de convertir a México en proveedor de Teca, ya que India, Camboya y Honduras dejarán de serlo, pues se acaban sus reservas de esos árboles.

Dijo que el acuerdo comercial se puede aprovechar mediante alianzas empresariales para producir un producto conjuntamente y luego exportarlo a otras partes del mundo, especialmente en cuatro áreas de oportunidad: agua, agricultura, energías renovables, seguridad y tecnologías de la información.

“Tenemos que crear el triángulo Israel-México-mundo”, porque en este país hay capacidad, espacio y recursos naturales, y las empresas israelíes tienen tecnología e innovación que pueden conjuntarse para exportar a otros mercados bienes o servicios, explicó.

Samra Cohen aseguró que el tratado bilateral no tiene grandes resultados en cuanto al valor del intercambio de bienes, pero “va a prosperar cuando pongamos manos a la obra”.

El acuerdo entre ambos países se ratificó por el Senado mexicano el 28 de abril de 2000 y entró en vigor el 1 de junio de 2000; en estos 14 años el comercio creció entre dos y tres veces, aunque la participación en el total es muy baja.

En 2000 las exportaciones de México a Israel sumaron los 54.6 millones de dólares; para 2013, después la cifra subió a 111.9 millones; en el caso de las importaciones la cifra subió de 296.5 millones a 615.8 millones de dólares, números que representaron 0.06% del valor total del comercio mexicano en 2013, de acuerdo con el Banco de México y la Secretaría de Economía.

En cuanto a las inversiones israelíes en la economía mexicana, éstas tienen un acumulado de 55 millones de dólares. En 2013 solamente se invirtieron 8.2 millones de dólares de un total de 35 mil millones que recibió el país, según cifras del Reporte Nacional de Inversión Extranjera.

Atractivo

Para Samra, las reformas estructurales podrían atraer más la mirada de Israel, aunque dependerá de las leyes secundarias y de las reglas que se hagan en el sector energético y de telecomunicaciones, entre otros.

Además, esperan que se hagan valer más las leyes en el país, porque “sí estamos preocupados por la inseguridad”, admitió.

Desde que entró en vigor el acuerdo comercial hasta la fecha se calcula que 500 empresas mexicanas han ido a Israel y viceversa, pero solamente entre 50 y 70 se instalaron en definitiva, así que la meta de Samra es atraer más firmas a México, sobre todo de las cuatro áreas prioritarias.

Traer 100 compañías sería la meta, “pero si solamente una empresa viene al país ya valió la pena. Una es buena y 100 son buenísimas”, afirma.

Aseguró que en el tema de innovación y tecnología hay mucha área de oportunidad, considerando que en Israel se invierte el 4% del PIB en ese rubro y hay muchas empresas que han hecho desarrollos importantes, mientras que en México la inversión apenas es de 0.4%.

Fue con desarrollo que se logró que los árboles de Teca crecieran en cuatro años en lugar de esperar 18; hay plantas de desalinización en México que utilizan equipo israelí, fármacos para combatir hepatitis y equipos de seguridad que ya utilizan la Secretaría de la Defensa, la Procuraduría General de la República y gobiernos de los estados.

Mientras que a Israel llegan coches, tequila y granos mexicanos, pero pudieran llegar más cosas, aunque la población del país de Medio Oriente apenas es de 8 millones de habitantes, lo que contrasta con los más de 120 millones que hay en México, concluyó.

Fuente: El Universal