ENRIQUE RIVERA PARA ENLACE JUDÍO
Es sabido que México ocupa un poco honroso primer lugar en lo que a obesidad se refiere. El consumo de refrescos, bebidas azucaradas, así como harinas refinadas está dejando una secuela muy visible de estragos, no sólo en la forma, sino en la salud de las personas que la padecen.
La Lic. en Nutrición y Especialista en Diabetes,Valeria Kuwal, impartió recientemente un curso sobre nutrición en la Comunidad Bet El. Ahí, con sencillas explicaciones, ilustró la forma en que ciertos alimentos van causando el deterioro de células y, por ende, de organismos. Uno de los principales efectos de la mala alimentación puede apreciarse en la sobreproducción de insulina, la cual se lleva a cabo en el páncreas.
En términos presupuestarios, el problema de obesidad y diabetes se traduce en partidas mayores para combatir dichos males. La Lic. Kuwal comentó que el presupuesto asignado al sector salud, de seguir la tendencia, estaría destinado dentro de 5 años sólo a atacar estos malestares y hablamos de que en el 2014 el presupuesto asignado al sector salud fue de 130 mil 120 millones de pesos.
A pregunta expresa, la joven profesionista señaló: “No se requiere un gran presupuesto para tener una buena nutrición, se debe tener una alimentación balanceada. En ese sentido, cabe destacar que existe el “Plato del Buen Comer”, el cual divide el tipo de alimentos que se deben consumir y su frecuencia, dicho esquema fue elaborado por el gobierno de la República y puede ser una guía efectiva en la educación alimentaria.
Finalmente, la Lic. Kuwal, comentó que sí existe un problema relacionado con los conceptos de estar lleno y estar satisfecho: “no debemos sentir que reventamos para estar satisfechos de comida”, acotó.
