ENRIQUE RIVERA PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO

Hablar de las Voluntarias Judeo Mexicanas es evocar un gran cúmulo de sucesos y eventos en los cuales este puñado de mujeres de nuestra comunidad, en varias épocas y circunstancias, se han hecho presentes en la historia de México. Y es que, en sus fructíferos 80 años de existencia, estas damas se han distinguido tanto por su eficiencia como por su amor a México, apoyando siempre a los más desfavorecidos.

Su presencia se ha hecho patente en hospitales como en escuelas, centros de atención a discapacitados, Cruz Roja, al igual que en momentos de desastres naturales. En fin, su huella, como ya se mencionó, abarca un gran número de momentos en que la ayuda, pero sobre todo la presencia y la solidaridad son bienvenidas.

Pero, no se crea que porque el grupo de damas de la Comunidad Judía de México está próximo a cumplir un siglo y porque, dentro de las voluntarias, hay grupos con 40 ó más años de existencia, el grupo está en decadencia. Nada más lejos de eso.

En entrevista exclusiva con su Presidenta, la Sra. Sonia Jacob, esta nos comentó: “A finales del años pasado nos afiliamos con el Consejo Internacional de Mujeres Judías. Esta organización se encarga de los Derechos de la Mujer y de los Derechos Humanos.

Dicha organización nace por ahí de 1912, cuando dos mujeres judías, una norteamericana y la otra alemana, acudían a la estación del tren para llevarse a las mujeres que venían a casarse, pero que al final eran llevadas por los hombres para prostituirlas. Las mujeres ya mencionadas las tomaban y las llevaban a casas donde les enseñaban oficios y las protegían. La labor se interrumpió con las guerras, pero luego se retomó”, dijo.

La Sra. Jacob, así como Lilian Greeberg y Beatriz Bacal, fuimos invitadas a Praga a un gran evento del mencionado Consejo, en el cual asistieron a varias conferencias.
Pero volviendo a México y a nuestra realidad, Sonia Jacob, Presidenta de las Voluntarias Judeo Mexicanas hizo una amplia invitación a todas las mujeres de la Comunidad a fin de que se unan a esta organización o, en su defecto, apoyen las causas en las cuales ellas se hallan inmersas. “Es más satisfactorio dar, que recibir”, acotó la presidenta de las Voluntarias Judeo Mexicanas.