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AVI ISSACHAROFF

El presidente de la Autoridad Palestina no reconstruirá Gaza si Hamas se interpone en su camino, ni trabajará con Israel en Cisjordania a menos de que se promueva el establecimiento de un estado palestino.

Este domingo el Presidente Palestino Mahmoud Abbas reunió a sus consejeros en Ramala antes de la visita planeada de Saeb Erekat y el jefe de Inteligencia para EE.UU. Majed Faraj. Los negociadores se encontrarán la semana entrante con el Secretario de Estado John Kerry y junto con Abbas, presentarán la nueva propuesta diplomática.

En la reunión, se discutieron las tensiones entre la AP y Hamas, mismas que han prevalecido luego del cese del conflicto en la Franja de Gaza. El líder palestino y sus confidentes saben bien que a pesar de los elogios de líderes de Hamas respecto a la unidad palestina, palabras y acciones son dos cosas diferentes.

Incluso en la cúspide del conflicto Israel-Hamas, las fuerzas de seguridad de Hamas tomaron medidas contra activistas de Fatah en Gaza. Sus miembros fueron arrestados, mientras que algunos de los ¨colaboradores sospechosos¨ ejecutados pertenecen a Fatah. Durante el fin de semana, militantes de Hamas evitaron que se abran las oficinas de cinco ¨gobernadores¨ de Abbas asignados en la víspera del conflicto en un esfuerzo del líder de la AP a fin de demostrar alguna autoridad en el enclave.

Por su parte, los servicios de seguridad e inteligencia de la Autoridad Palestina y la fuerza de seguridad preventiva realizaron una serie de detenciones de operativos de Hamas en Cisjordania.

En otras palabras, no hay cambios entre Fatah y Hamas: El conflicto de Gaza contra Israel finalizó, pero sin embargo, los enfrentamientos entre ambas organizaciones palestinas prevalece.

Esta rivalidad ahora amenaza con paralizar los esfuerzos de rehabilitación de la Franja de Gaza. Funcionarios de la AP aseguran que Abbas no está dispuesto a seguir el juego de Hamas: No tolerará los elogios de Hamas respecto a la reconciliación por un lado y sus esfuerzos para obstaculizar el trabajo de la AP por el otro.

El líder palestino asignó un comité de cinco líderes de Fatah para negociar las siguientes medidas a tomar en Gaza. El comité exigirá la libertad de acción del Primer Ministro de la Autoridad Palestina Rami Hamdallah para operar en Gaza y no más ataques del personal de Fatah en la Franja. Los representantes de Abbas anunciarán que si estas condiciones no se cumplen, los funcionarios de Hamas no recibirán sus salarios y la responsabilidad sobre la rehabilitación de Gaza caerá sobre los hombros de Hamas únicamente.

Por su parte, Hamas no se apresura a prescindir del control sobre Gaza y desalojar su lugar para ser ocupado por la gente de Abbas.

Simultáneamente, Mahmoud Abbas pretende intensificar la presión diplomática sobre Israel. Su iniciativa de paz, que presentará ante la Liga Árabe próximamente, tiene por objeto solicitar a los americanos presionar a Israel para presentar un mapa del futuro estado palestino como base para negociaciones sustanciales. Posteriormente, Abbas exige que se fije un plazo para la retirada de Israel de Cisjordania y el establecimiento del estado palestino con Jerusalem como su capital.

Si Israel se niega a dicha iniciativa o no responde, la Organización para la Liberación de Palestina apelará al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en un lapso de tres meses y solicitará una resolución para el reconocimiento de un estado palestino en base a las fronteras de 1967.

Anticipando el veto de EE.UU., los palestinos también presentarán la solicitud ante la Asamblea General. Posteriormente, la OLP solicitará de los organismos internacionales el reconocimiento de Palestina como nación bajo ocupación, según las Convenciones de Ginebra.

Por último, Abbas tiene por objeto suspender las operaciones conjuntas de seguridad con Israel, esenciales para conservar la clama en Cisjordania, y delegar el control en las ciudades palestinas a las FDI.

Fuentes palestinas señalan que nadie está hablando de desmantelar a la Autoridad Palestina, pero que en la práctica dejará de funcionar como tal.

El final de esta cooperación en cuestiones de seguridad aún está por verse, pues aún pueden producirse cambios en los planes de Abbas.

Sin embargo, el líder palestino y sus confidentes cercanos han amenazado que si Israel se niega a presentar el mapa de la futura Palestina hasta el final de año gregoriano (diciembre), habrá una confrontación diplomática entre las partes que pondrá fin a la cooperación conjunta cuestiones sobre seguridad.

Traducción: Esti Peled

Fuente: Times of Israel.