AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Estamos acostumbrados a pensar que la religión gobierna la esfera de lo ritual y de las creencias – los temas del espíritu- pero que tiene poco que ver con la vida cotidiana. Sin embargo, para el judaísmo, la manera en la cual conducimos nuestros asuntos cotidianos es por lo menos tan importante como nuestra asistencia a la sinagoga y nuestros hábitos alimenticios.

Parte A. – La Primera Pregunta

La fuente siguiente es un ejemplo de la supremacía que el judaísmo otorga al valor del comportamiento ético.

1. Shabat 31a –La primera pregunta que se le formula a una persona cuando se presenta ante el Tribunal Superior (después de morir) se refiere a su ética en los negocios.

Rava dice: Cuando la persona entra al Juicio se le pregunta: “¿Llevaste a cabo tus negocios con fidelidad?”

En el Gran Día del Juicio, después de que la persona parte del mundo, será considerada responsable por la manera en la cual llevó adelante sus acuerdos comerciales.

De acuerdo con los Sabios del Talmud, ésta es la primera pregunta que se le formula a la persona en el Tribunal Superior. Esto nos enseña mucho sobre la importancia que tienen los negocios de la persona en este mundo.

Pero esto despierta una pregunta: ¿qué tiene que ver la religión con la ética comercial?

Parte B – El Lugar de Trabajo Como Campo de Prueba de Nuestros Valores

El lugar de trabajo es el campo de prueba para lograr valores que son fundamentales para el mensaje del judaísmo:

1. Vaikrá (Levítico) 19:35-36 – Las prohibiciones contra la falsificación de pesas y medidas incluyen una referencia al Éxodo.

No falsificarán las mediciones en tamaño, en peso ni en volumen. Tendrán balanzas justas, pesas justas, medidas secas justas y medidas líquidas justas. Yo soy el Eterno su D’os, que los saqué de la tierra de Egipto.

¿Qué tiene que ver el hecho de que D’os nos sacó de Egipto con la obligación de utilizar pesos y medidas exactos?

2. Torat Kohanim, Ibíd. – La yuxtaposición del Éxodo con la exactitud de los pesos y las medidas nos enseña una lección.

“Yo soy el Eterno su D’os, que los saqué de la tierra de Egipto” – Yo los saqué de Egipto con la condición de que observen los mandamientos relativos a las medidas.

La intervención sobrenatural de D’os tuvo el objetivo de dar nacimiento a un nuevo pueblo, un pueblo que incorporaría la conciencia de la realidad Divina en la estructura misma de sus vidas. Una de las áreas fundamentales de la vida, y una en la cual es más difícil mantener constantemente la conciencia de la realidad Divina, es en el mundo del comercio. Mantener los principios adecuados en los negocios es el cumplimiento del propósito del éxodo de Egipto. Aquí se resalta la idea de que los negocios son el campo en el cual verdaderamente se pone a prueba nuestra creencia en D’os.

Parte C – Confiar en D’os

El desafío de la conducta en los negocios tiene su raíz en el pensamiento de que el hecho de actuar éticamente puede provocarle una pérdida a la persona. Al final de cuentas, “¡los chicos buenos llegan últimos!”. Uno puede sentir que si no hace la “vista gorda” en algún sentido, se quedará atrás de los demás y no logrará llegar a la meta. Por eso es importante colocar las cosas en perspectiva, recordar que en última instancia el éxito que tiene la persona en ganarse el sustento –así como en todas las otras áreas de la vida- se encuentra en las manos de D’os.

Etica31. Mishlei (Proverbios) 28:20 – Confiar en D’os es un conducto para la bendición.
El hombre de fe [tiene] muchas bendiciones; pero aquél que se apura por hacerse rico no saldrá ileso.

2. El Gaón de Vilna, Comentario sobre Mishlei 28:20 – Correr tras de la riqueza rápida es una receta para el fracaso.
El hombre de fe – aquél que confía en D’os, “tiene muchas bendiciones”, pero “aquél que se apura por hacerse rico” –es decir, quien corre constantemente detrás del dinero- “no saldrá ileso”.

3. Rab Jaim Vital, Shaarei Kedushá, 2:5 – La fe se traduce en acuerdos comerciales leales.
Dicen los Sabios: “El hombre de fe [tiene] muchas bendiciones” – esto se refiere a alguien que conduce sus negocios con integridad; sus bienes se incrementarán y D’os le proveerá sustento.

El hombre de fe es tanto una persona de confianza como alguien que confía en D’os. Él sabe que todo está en las manos de D’os, y a pesar de realizar el esfuerzo necesario, no se ve tentado a buscar atajos. Hay una conexión directa entre la fe que la persona tiene en D’os y la fidelidad con la cual ella lleva adelante sus negocios.

4. Rab Naftali Tzvi Iehudá Berlin, HaEmek Davar, Devarim (Deuteronomio) 25:17 – Las prácticas comerciales deshonestas revelan una falta de fe en la Providencia Divina.

Lo que afirmaron nuestros Sabios (Bava Batra 88b) con respecto al pecado de las medidas (inexactas), diciendo que incluso es peor que la inmoralidad sexual, nos lleva a preguntarnos por qué esta forma de robo debe considerarse peor que cualquier otra. Además, ¿por qué se lo compara con la inmoralidad sexual y cómo es posible que se lo considere algo peor?

Nuestros Sabios describieron tres pecados cardinales: la inmoralidad sexual, la idolatría y el asesinato. Ahora bien, la razón por la cual estos tres son los peores pecados no se debe al castigo que se aplica a sus perpetradores sino más bien al hecho de que cada uno de ellos representa una clase específica de un defecto fundamental. Es decir, [que estos tres pecados demuestran] ya sea una falta de fe en D’os y en Su Torá, o una falta de auto control sobre las propias pasiones o la pérdida de control debido al enojo o a otras tendencias antisociales. La principal forma de falta de fe es la idolatría; la principal forma de transgresión pasional es la inmoralidad sexual y la principal [transgresión debido a] malas cualidades personales es el asesinato. Lo peor de estas tres cosas es la idolatría.

Ahora bien, cuando alguien roba algo abiertamente, entendemos que esto se debe a su deseo por ese objeto y su crimen puede ser categorizado como una inmoralidad. Pero cuando alguien roba falsificando sus pesos y medidas, esto no se debe a su deseo sino más bien a una falta de fe en el D’os que nos mantiene y nos alimenta a través de la providencia directa de acuerdo con nuestros actos. Por lo tanto, esto es una forma de idolatría. Por eso, los Sabios dijeron que falsificar las medidas, a pesar de que es sólo una rama de la idolatría y se encuentra lejos de la idolatría misma, de todas maneras es peor que la inmoralidad sexual, la principal forma de otra clase de imperfección, porque la falta de fe es más difícil de corregir y afecta el honor de D’os.

Temas Claves de la Sección I.

• El judaísmo otorga suprema importancia al valor del comportamiento ético específicamente en relación con las relaciones comerciales. Ésta es la primera cosa por lo cual la persona será considerada responsable después de su muerte.

• El lugar de trabajo es el principal campo de prueba de nuestros principios religiosos. Ante el desafío de la competencia comercial, la persona debe tener fe en D’os y manejar sus negocios con honestidad.

• Saber que D’os está en control nos otorga la libertad para actuar de buena fe sin preocuparnos de perder ante los demás.

Fuente: Morashá NLE

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