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Un alto oficial de la oposición siria y un comandante de los rebeldes informaron a Associated Press, que líderes militantes del Estado Islámico y Al-Qaeda se reunieron en Siria la semana pasada y acordaron formar una alianza para combatir a sus opositores.
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La alianza presentaría nuevas dificultades para la estrategia de Washington contra ISIS. Mientras aviones de combate de la coalición internacional atacan desde el aire, la administración de Obama arma a los rebeldes ¨moderados¨ para luchar contra el Estado Islámico en tierra. Estos rebeldes, considerados relativamente débiles y desorganizados, enfrentarían a una oposición mucho más sólida tras la unión de ambos grupos militantes.
Hasta el momento, ISIS y Al-Qaeda han luchado amargamente entre sí por más de un año para dominar la rebelión en contra del Presidente Sirio Bashar Assad.
El Frente al-Nusra afiliado a Al-Qaeda es considerado una de la facciones dominantes que pretenden derrocar a Assad. El Estado Islámico se unió a la guerra en 2012 desde Irak adquiriendo pronta reputación por sus actos de brutalidad, además de imponerse como facción dominante en la rebelión islamista. Inicialmente, Al-Qaeda negó toda función a ISIS en Siria y al-Nusra entró en una guerra interna contra el grupo militante, junto con otras facciones. Pero ISIS creció en poder, incrementó sus armas y financiamiento, invadiendo zonas del norte y oeste de Irak durante el verano.
Pese a que agentes de la inteligencia americana afirmaron que no observaban cambios en la estrategia de ambos grupos, Abu Musafer, comandante de las brigadas afiliadas con el Ejercito Libre Sirio respaldado por el occidente, corroboró el encuentro de representantes de ISIS y Al-Qaeda en una zona controlada por los militantes.
Abu Musafer informó que los grupos acordaron no pelear más entre sí y abrir un frente unido contra los kurdos en dos nuevas áreas del norte de Siria. ISIS y el Frente al-Nusra acordaron unirse para eliminar las fuerzas del Frente de Revolucionarios Sirios, una facción prominente de rebeldes, armada y entrenada por Estados Unidos y dirigida por Jamal Maarouf.
La semana pasada, ISIS ofreció enviar militantes al Frente al-Nusra en el ataque contra el Movimiento Hazm respaldado por el occidente en el norte de Siria. En este caso, 65 miembros de Hazm desertaron y se unieron a al-Nusra.
Tom Joscelyn, un analista americano que rastrea a los grupos terroristas para el sitio Long War Journal comentó que si ambos grupos colaboran juntos, los jidahistas serán más efectivos en Siria. ¨El derrame de menos sangre entre ambos grupos facilita la lucha de los jidahistas contra Assad y las fuerzas respaldadas por el occidente,¨ concluye Joscelyn.
Fuente: The Washington Post, Associated Press.
