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AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

Surge una tendencia entre la ultraderecha de vestirse según la moda urbana. Se llaman “nipsters”.

Antes era fácil reconocer a un neonazi: botines, cabeza rapada, chaqueta de cuero, un tatuaje en la parte posterior de la cabeza. Ahora todo es más complicado. Hoy podemos encontrarnos con un “nipster“, es decir, un nazi vestido como un inconformista. Un nazi-vegetariano en los pantalones con cintura baja, con una barba y una bolsa de yute, que apareció en una exposición de Magdeburg a principios de año, se ha convertido en un fenómeno.

Pero el cambio de look no significa el cambio de la ideología, sino el propósito de pasar desapercibidos y, lo que es más importante, la nueva estrategia para atraer a la juventud, mediante el cambio y la actualización de la estética y los postulados ideológicos que no se han cambiado desde los años 30. Las marchas fúnebres y ceremonias en memoria de los héroes de la idea ya no atraen a nuevos seguidores. El líder de los nipster en Alemania, Patrick Schröder, considera que el nuevo aspecto da al movimiento nazi un toque más amigable y moderno.

Patrick Schröder se hace llamar “neonazi educado” y emite un programa semanal en Internet que se dedica a la política y la cultura pop, todo ello bajo el símbolo H8 que suena como hate (odio) pero también hace referencia a Heil Hitler. Entre sus invitados habituales se encuentra el cantante Frank Rennicke, que ocupa un lugar destacado entre los alemanes de derecha y se presentó dos veces como candidato del Partido Nacional Democrático de Alemania (PND) a la presidencia del país. Respondiendo sobre la formación de sus seis hijos, Frank Rennicke dijo que se considera “un liberal en términos de educación y enemigo de la propaganda”, aunque algunos patriotas no están de acuerdo con él.

“Si un nipster es aquel que puede vivir en la sociedad dominante, creo que es el futuro de nuestro movimiento”, – suele decir Patrick Schroeder. Incluso tienen su propio canal de cocina vegana en YouTube. Dos hombres enmascarados, en pantalones beige y camisetas moradas, con los contornos de la cara de Hitler, cuentan acerca de las recetas en el programa “Balaclava-Küche” y recomiendan el uso de productos locales y preferiblemente biológicos, para “evitar los insecticidas y el transporte que contaminan nuestro planeta”. Uno de sus lemas: “¡No compres nada de Israel!”

El cambio se nota no solo en las preferencias culturales y estéticas, sino en los enfoques político-sociales también. Los nipster se apuntan a la defensa de animales, rechazan la violencia “injustificada” sin objetivo y llaman a sus seguidores a dirigir sus esfuerzos hacía los objetivos políticos y sociales. Paralelamente, con el cambio de su aspecto se transforman y sus lemas llegan a veces a parecerse a algunos de sus rivales políticos, como por ejemplo “Ningún humano es ilegal”. Eso sí, lo utilizan contra los defensores de la prohibición del PND, demostrando así la doble moral de sus opositores.

Fuente:blastingnews.com