Israel, Corea del Norte y Egipto son los 3 países que se niegan a unirse al tratado sobre armas químicas.

armas químicas

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

Un alto funcionario de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) dijo a periodistas israelíes esta semana que Israel tiene armas químicas, y debería reconsiderar su negativa a unirse al tratado internacional que prohíbe la posesión y uso de estas armas.

Con su impresionante éxito en el desmantelamiento del programa de armas químicas de Siria, por el que se concedió a la organización el Premio Nobel de la Paz en 2013, la OPAQ tiene ahora la intención de que Israel y los otros cinco estados que todavía no se han adherido al tratado se unan a las 190 naciones que ya lo han hecho.

Tres de los seis países, Myanmar, Angola y Sudán del Sur, deberían unirse al tratado durante el próximo año, dejando a Corea del Norte, Egipto e Israel como los últimos bastiones de Estados refractarios.

Habiendo supervisada la retirada de los últimos arsenales de armas químicas declaradas por Siria y asegurado la destrucción de su producción y de sus instalaciones de almacenamiento, la OPAQ cree que Israel debería reconsiderar su tradicional rechazo a unirse al tratado que entró en vigor hace 17 años.

La organización ha estado en contacto sobre este tema con la Embajada de Israel en La Haya, pero no se han mantenido negociaciones formales.

Israel mantiene una “política de ambigüedad” negándose a confirmar o desmentir las sospechas de que posee armas nucleares y armas químicas. Ha ofrecido varias explicaciones por su negativa a unirse al tratado sobre armas químicas, entre ellas que no cree que el programa de Siria haya sido completamente erradicado.

“La hipótesis de la que tenemos conocimiento es que no todo ha sido destruido”, dijo un funcionario. Las autoridades militares también dijeron que Siria ha conservado una capacidad residual.

“No puedo asegurar 100% que no escondan nada, se puede encontrar algo de munición aquí y allá, pero no hay ningún programa para su producción”, dijo un alto funcionario de la OPAQ. A partir de 2013, los inspectores de la organización supervisaron la retirada de 1,300 toneladas de productos químicos prohibidos reportados por Siria. El 98% de ellos fueron destruidos en un barco especialmente equipado para la ocasión, en cabo Rayo, así como en instalaciones de Finlandia y otros lugares.

Las cifras reportadas fueron consistentes con la información recibida de Estados Unidos y Rusia, que son los que han proporcionado a Siria la mayor parte de su arsenal químico, dijo el funcionario.

Pero la OPAQ también reconoce que las declaraciones de Siria, que han cambiado diez veces desde la primera, tal vez no estaban completas.

Con base a la información recibida de varios países, la organización envió un equipo a Damasco esta semana para hacer preguntas sobre algunas divergencias.

“Tenemos la sospecha de que tal y tal lugar pueden no haberse declarado. Vamos a preguntarles si pueden proporcionar evidencia de que ya no existen o si podemos inspeccionar el lugar”, dijo el funcionario.

Otra cuestión es sobre el gas mostaza. Siria sólo declaró veinte toneladas, alegando haber destruido unilateralmente cientos de toneladas adicionales a principios de 2013, una práctica utilizada por otros Estados antes de su adhesión al tratado. Las muestras de suelo provenientes del sitio también podrían proporcionar respuestas para saber si estas existencias han sido destruidas o no.

Siria declaró doce instalaciones de almacenamiento de armas químicas y veintisiete centros de producción. Hasta ahora, todo el material en estos sitios se ha vuelto inoperante y destruido en presencia de inspectores de la OPAQ, pero cinco túneles y siete hangares aun deben ser completamente arrasados.

El primer túnel será destruido con la ayuda de explosivos en presencia de un equipo de la OPAQ a mediados de enero. La demolición de las otras once instalaciones tomará de seis a siete meses.

Israel tiene ahora sólo un vecino con arsenal químico significativo, Egipto, que tendría según la OPAQ miles de toneladas de estos compuestos mortales. Egipto, uno de los dos únicos países árabes que tienen un tratado de paz con Israel, dice que se unirá al Tratado una vez que lo haga Israel.

La OPAQ espera que Estados Unidos, un importante aliado de Egipto, sea capaz de convencer al nuevo gobierno en El Cairo de seguir el ejemplo de Siria. “Creo que Israel también debería estar bajo la presión de sus aliados”, dijo el funcionario.

“Vosotros tenéis un ejército convencional muy bien equipado, tenéis buenos programas de defensa contra las armas químicas y biológicas. Vosotros nunca utilizaréis armas químicas de ninguna manera y hay muchos más beneficios uniéndose al tratado que no uniéndose a él. Sería vergonzoso estar a solas con Corea del Norte en la posesión de armas químicas”.

Irónicamente, Israel, bajo el gobierno del ex primer ministro Yitzhak Rabin, participó activamente en la redacción del tratado y fue uno de sus primeros signatarios en 1993.

“Era un momento diferente, después de la Conferencia de Paz de Madrid (entre Israel y los Estados árabes, y justo antes de los acuerdos de Oslo con los palestinos)”, dijo un funcionario israelí. “Medio Oriente hoy no es el Medio Oriente de entonces. Vivimos en un entorno salvaje, en un clima de incertidumbre total.”

Fuente: i24News
Traducción: Silvia Schnessel