AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO
La semana pasada, la Sra Sara Attie de Cohen falleció en un asalto. La siguiente carta fue escrita por su bisnieta, Lilian Shiver de Sidauy, y refleja el dolor y el desconcierto de todos nosotros.
Querida Comunidad
“Me cuesta trabajo expresar este terrible sentimiento impregnado en mi alma. Esta rabia e impotencia de esta irreparable situación. Esta enorme pérdida que me ha dejado fría y triste, rota, deshecha, muerta de miedo. Miedo a salir a las calles, miedo a traer hijos a este violento mundo, miedo a salir de mi casa, miedo a nuestro Mexico, donde la violencia crece cada día.
Debemos hacer algo con nuestro país. Debemos luchar contra la delincuencia y la violencia, debemos terminar con todas estas personas que día a día asesinan a personas inocentes, debemos hacer algo. ¿Qué es lo que nos tiene que suceder para hacer conciencia? ¿Qué estamos esperando para combatir estos horribles crímenes? Nada. Estamos colaborando, haciendo del nuestro un país corrupto, dando mordidas, y dando a entender a nuestras familias que con dinero -y no con justicia- se resuelven las cosas. ¿No están cansados de todo esto?
No podemos seguir permitiendo que circulen en las calles personas armadas, asaltantes, secuestradores, personas malas que dedican su vida diaria a la violencia y delincuencia. Tenemos que pararlo. El jueves, fue mi abuela quien recibió un balazo en la puerta de su casa. Le quitaron su vida para quitarle su bolsa y robarle su dinero. Eso quiere decir que el peligro está en todos lados. Ayer nos tocó enterrar a un ser de luz y con muchos años por delante, a una mujer hermosa y entera. A una mujer que hoy ya no tenemos.
Hoy me hundo en lagrimas, y solo espero que esta tristeza algún día se vaya.
La delincuencia está en las puertas de nuestras casas y no podemos seguir permitiendo asesinatos como éste. No podemos dejar que esto crezca. Me arrebataron a mi abuela de la forma más terrible y trágica, y esto no puede seguir pasando. En nosotros está el hacer algo, hacer un cambio empezando por nosotros. Cada quien debe ocuparse de ser mejor persona día a día, y hacer algo para combatir el problema que se vive hoy en nuestro país. Siempre oímos en las noticias, en el radio o por chismes, que suceden crímenes todos los días.
Pero el jueves fue mi abuela quien lo vivió. Fue ella la víctima de esta terrible delincuencia que tenemos en nuestro país. Fue mi hermosa abuela quien fue asesinada en manos de un ladrón.
Sólo les pido conciencia. Les pido que se cuiden y cuiden a sus familias. Salgan a las calles sin llamar la atención. Cuiden sus espaldas, que la maldad anda por todos lados.
No quiero tratar de entender lo que pasó, porque sé que no tendré éxito. Es imposible entenderlo; sólo me toca aceptarlo y vivir con ello.
Abuelita Sarita
Descansa en paz, porque yo te juro que esto no se va a quedar así, tu muerte no quedará impune y quien lo hizo, pagará. Hay un D-os allá arriba que todo lo ve. No me despido de ti, abue. Nos vemos del otro lado, porque sé que algún día nos volveremos a encontrar”.
