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LEÓN OPALÍN PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO

La violencia de los fundamentalistas islámicos en Europa está ampliamente documentada, particularmente contra las comunidades judías.

Los palestinos terroristas de Hamas han incrementado los atentados contra israelíes en Jerusalén y Cisjordania y también lo han hecho desde la Franja de Gaza; incluso desde esta última han lanzado el primer cohete contra Israel desde la tregua que establecieron después de la guerra que se desató entre ambos en el verano pasado. Como represalia, la Fuerza Aérea de Israel bombardeo un objetivo de Hamas en el Sur de la Franja y, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu (BN), advirtió que no tolerará un solo cohete disparado desde Gaza. Asimismo, otras fuerzas de Hezbolá, Irán y Alqaeda que operan en el Sinaí en Cooperación con Hamas, han realizado ataques contra Israel y contra Egipto; el presidente de esta última nación, Al Sisi, “ha actuado en alianza con Israel en la lucha contra los Yihadistas al considerar que representan una amenaza contra Egipto”, incluso, ha tomado medidas para frenar el contrabando de armas y personas desde Egipto a la Franja de Gaza.

Por otra parte, Hamas ya está rehabilitando los túneles que destruyeron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) con la Operación Margen Protector y que penetraban a la zona fronteriza de Israel; adicionalmente está cavando nuevos túneles. Las FDI bombardearon recientemente una fábrica de cemento en la Franja destinada a proporcionar la materia prima para este propósito. Hamas sueña con conectar los túneles desde la Franja a territorio israelí para realizar matanzas masivas y capturar al mayor número posible de gente en su afán de “desaparecer del mapa a Israel”. En este ámbito, resulta lamentable que los recursos que Occidente está proporcionando para reconstruir las viviendas destruidas en Gaza en la guerra del verano pasado, más de 5,000 millones de dólares, estén siendo utilizados para reconstruir los túneles. Por lo demás, existen evidencias de que Irán ha vuelto a suministrar misiles y ayuda financiera a Hamas, suspendida por el apoyo de Irán al presidente Bashar Al Assad de Siria en su lucha contra los insurgentes y el involucramiento de Hamas en la misma a favor de estos últimos.

Analistas políticos consideran que Hamas ha optado por la guerra para no entregar el poder al gobierno de Unidad Nacional que en teoría acordaron la Autoridad Nacional Palestina y Hamas en la primavera del 2014 para dirigir Cisjordania y la Franja de Gaza. En este contexto, resulta incongruente la propuesta que los palestinos presentaron ante el Consejo de Seguridad de la ONU el 11 de diciembre pasado, por medio de Jordania, para que Israel se retire- a finales del 2017- de los “territorios ocupados” a las líneas anteriores a 1967 y se cree un Estado palestino y, a cambio, prácticamente no se le concede nada a Israel. Con ello “se dejaría abierta la puerta para seguir luchando” (los palestinos) por la destrucción de Israel. Frente a esta petición, el Primer Ministro, BN, se ha comprometido a rechazar dictados unilaterales, consignando que las apelaciones de la Autoridad Nacional Palestina a organismos internacionales constituyen una amenaza mayor para esta última que para Israel, porque eso dará lugar a que Hamas tome el control de Judea y Samaria, tal como sucedió en la Franja de Gaza. El gobierno de Israel ha calificado las medidas diplomáticas de los palestinos “como un intento de evitar compromisos difíciles en la mesa de negociación”.

Así, en un entorno pro palestino en Europa, el Parlamento Europeo propuso la creación de dos Estados con base en las fronteras de 1967 y, paralelamente, está de acuerdo que se lleven a cabo las negociaciones de Paz entre Israel y los palestinos.

También los eurodiputados han expresado “su grave preocupación sobre la violencia creciente, especialmente en los lugares sagrados, que podría transformar el conflicto palestino-israelí en uno de carácter religioso”. Por otro lado, subrayaron que los asentamientos de los colonos judíos en los territorios palestinos son ilegales bajo el derecho internacional. Se considera que la posición del Parlamento Europeo es inconsistente si se tiene presente la violencia que palestinos y otros grupos musulmanes radicales generan en el Medio Oriente y en Europa misma; los atentados de los terroristas se han incrementado sensiblemente en este Continente; recientemente se observó en Francia a un islamista convocando a Alá para lanzar su vehículo contra ciudadanos de ese país.

La violencia de los fundamentalistas islámicos en Europa está ampliamente documentada, particularmente contra las comunidades judías. Resulta inexplicable la posición de apoyo del Parlamento Europeo a los palestinos, que aparentemente no está exento de vestigios del viejo antisemitismo que ha privado en Europa durante más de mil años. El colmo de la actitud antijudía de los europeos es el ordenamiento de la Corte Europea de Justicia para que sus integrantes retiren de inmediato al grupo Hamas de los calificados como movimientos terroristas, lo que representa un aliciente para continuar con sus acciones de violencia. El periodista David Ben Jaim, señala en tono jocoso que no sorprendería que el día de mañana le otorguen a Hamas el Premio Nobel de la Paz y que ese galardón fuera compartido por otros “grupos humanitarios” como el Estado Islámico, Boko Haram, Al Qaeda, la Hermandad Musulmana, Hezbolá y la Jihad Islámica. A pesar de que Europa se encuentra invadida de islamistas radicales, no ha aprendido la lección.