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ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Las demandas del primer ministro serían rechazadas no sólo por Irán, sino también por las potencias mundiales involucradas en las negociaciones nucleares, dice un alto funcionario norteamericano a Haaretz.

Por Barak Ravid

El presidente Barack Obama no escuchó el discurso del Primer Ministro Benjamín Netanyahu ante el Congreso el martes, aunque leyó la transcripción y se le informó sobre su contenido. Un alto funcionario estadounidense comentó que la Casa Blanca no estableció contacto con Netanyahu o su personal durante la visita del primer ministro a Washington.

En su discurso ante una sesión conjunta del Congreso, Netanyahu advirtió sobre el mal acuerdo que se está negociando entre las potencias mundiales e Irán, diciendo que este no bloquearía el proceso de Irán para obtener armas nucleares, sino que allanaría el camino para una bomba nuclear.

Contrariamente a las expectativas planteadas en reuniones de información por parte del personal de Netanyahu antes del discurso, el primer ministro no reveló información secreta sobre el incipiente acuerdo con Irán. Previo al discurso, funcionarios estadounidenses le advirtieron públicamente no divulgar dicha información, “pero no sabemos si nuestras advertencias públicas son la razón” por qué no lo hizo, comentó el funcionario.

La Casa Blanca considera que Netanyahu no presentó una alternativa al acuerdo emergente, y al mismo tiempo planteó demandas poco realistas de lo que él considera un mejor acuerdo.

“En su discurso, Netanyahu describió un acuerdo nuclear que nunca se llevará a la práctica,afirmó el alto funcionario. “Estamos de acuerdo con lo que dijo sobre la participación iraní en el terror y otras cosas negativas que hace Irán, pero las negociaciones están destinadas a impedir que Irán obtenga la bomba nuclear, y debemos centrarnos en eso.”

La demanda de Netanyahu de desmantelar la infraestructura nuclear sería rechazada no sólo por Irán, sino también por los demás países que participan en las conversaciones – Alemania, Gran Bretaña, Francia, Rusia y China.

Además, añadió, la demanda de Netanyahu de imponer sanciones adicionales contra Irán podría ser contraproducente. “¿El mundo apoyaría nuevas sanciones? Lo que podría ocurrir es que Irán abandonará las negociaciones, instale miles de nuevas centrifugadoras, active el reactor de Arak y rápidamente se convierta en un país capaz de producir armas nucleares. Nosotros estamos proponiendo un acuerdo que detendrá el programa nuclear de Irán durante más de una década.”

Incluso tras la expiración de acuerdo, Irán no será libre de hacer lo que le plazca, añadió, porque si entra en una carrera para obtener la bomba, nosotros podríamos imponer nuevas sanciones y poner en marcha un operación terrestre. No perderemos de vista ninguna de nuestras opciones.”

Bajo cualquier acuerdo, Irán tendrá que firmar el Protocolo Adicional al Tratado de No Proliferación Nuclear, que permite inspecciones sorpresa, señaló. Esto permanecerá en vigor incluso luego de que caduque el acuerdo, por lo que “podremos seguir supervisando el programa nuclear de Irán, durante una década más y entonces decidiremos lo que estamos dispuestos a aceptar o no aceptar. El acuerdo no es un cheque en blanco para que Irán pueda desarrollar sus capacidades nucleares en otros 10 o 15 años.”

Traducido desde Haaretz para Agencia de Noticias Enlace Judío México.