YONI BEN-MENACHEM
El 5 de marzo, el Comité Central de la O.L.P., considerado el organismo más importante de la O.L.P., en ausencia del Consejo Nacional Palestino (CNP) no operacional, decidió terminar la coordinación de la seguridad con Israel.
Antes que el comité se reuniera, funcionarios cercanos al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, advirtieron también de una decisión de desmantelar la A.P. Estas amenazas, sin embargo, han desaparecido como si nunca hubiesen sido hechas.
También puede interesarte
Aunque los medios de comunicación palestinos y árabes tuvieron un día festivo con la decisión de detener la coordinación de seguridad con Israel, no pasó ni un día antes que los asociados de Abbas comenzaran a explicar que ésta fue meramente una “recomendación” que requeriría de una decisión por parte del Comité Ejecutivo de la OLP y de un edicto presidencial firmado por Abbas.
En cualquier caso, explicaron, la decisión no será implementada en los días restantes antes de las elecciones israelíes del 17 de marzo.
Fuentes de la OLP dijeron que la AP esperaría a ver quién gana las elecciones antes de decidir si llevar a cabo o no la decisión.
Hace tres meses, Israel congeló la transferencia de ingresos por impuestos para los palestinos debido a sus aproximaciones al Consejo de Seguridad de la ONU y a la Corte Penal Internacional en La Haya.
Se estima que los ingresos por impuestos totalizan u$s127 millones mensuales, y la AP los utiliza para pagar salarios a unos 180,000 empleados de oficina.
Estados Unidos ejerció presión directa e indirecta sobre Abbas para que ejerza restricción y no tome ninguna medida irregular antes de las elecciones israelíes.
El 23 de febrero, el rey saudita Salman bin Abdulaziz, de conformidad con una solicitud del gobierno estadounidense, convocó a Abbas a Riad y le imploró que honre los deseos de Washington.
Amenazas Vacías
Ahora está claro que las amenazas de Abbas son vacías; fueron un intento por presionar a Israel para que libere los ingresos impositivos congelados. La decisión del Comité Central de la OLP también estuvo dirigida a contener la furia popular por el congelamiento de los ingresos y a mostrar que la AP no está preparada para someterse en forma pasiva a la sanción israelí.
En realidad, Abbas sabe que terminar la coordinación de seguridad con Israel dañará a los palestinos más que a nadie. Apenas algunos meses atrás, Israel rescató al gobierno de Abbas cuando la Agencia de Seguridad de Israel (Shabak) arrestó a una extensa red de Hamas en Judea y Samaria que había planificado desestabilizar a la AP con una serie de ataques.
La coordinación de seguridad es una parte inseparable del acuerdo de Oslo firmado por Israel y la OLP en 1993. Aunque la AP ha violado numerosas cláusulas del acuerdo, hasta ahora se está absteniendo de violar esta cláusula en particular.
Fuentes de Fatah afirman que el ejercicio a gran escala conducido por las FDI en Judea y Samaria días antes de que se reuniera el Comité Central de la OLP en Ramallah estuvo destinado a señalar a los palestinos que Israel no vacilará en reconquistar toda la Margen Occidental si tiene que hacerlo.
Por ahora ha sido diferida una intensificación del conflicto entre Israel y la AP. No obstante, los palestinos no han retirado su solicitud de unirse a la Corte Penal Internacional en La Haya.
Yoni Ben Menachem es un analista principal del Medio Oriente para el Jerusalem Center y ex Director General y Jefe de Redacción de la Autoridad de Transmisión de Israel.
Fuente: Jerusalem Center for Public Affairs
Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México
