THELMA KIRSCH PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO.
Ahora que regresamos a nuestra vida cotidiana después de un Pésaj estupendo; (algunas familias recibieron invitados, otras visitaron a sus familiares, y algunos otros simplemente se relajaron) llegamos a una de las fechas más profundas y sensibles del calendario. Un día que aún sangra en nuestros corazones como judíos y como seres humanos.
Como cada año, en el Centro Israelita se preparó un evento en el que se recuerdan a los seis millones de víctimas del Holocausto. Se encendieron las velas que simbolizan la luz que se extinguió con su desaparición, y este año contamos con la presencia de una personalidad muy especial: El Dr. Salih Hardaga Sadikovic, hijo de un “Justo entre las Naciones” que narró sus experiencias y las de su familia durante este período. Proveniente de Sarajevo, Bosnia, es un sobreviviente que desde 1976 vive en nuestro país.
Fue muy difícil escuchar su testimonio, no por el hecho de que jamás hayamos oído hablar de los horrores que se vivieron durante la Segunda Guerra Mundial sino por las preguntas que quedaron abiertas a todos los asistentes. Preguntas que nos hicieron pensar y recapacitar acerca del heroísmo de aquellos que hoy el Estado de Israel ha nombrado “Justos entre las Naciones”.
-¿Cómo transmitir a las nuevas generaciones los horrores vividos?
-¿Estamos destinados, como humanos, a que vuelva a suceder?
Y la pregunta que nadie pudo contestar y que a muchos nos dejó sin poder movernos, sin saber qué contestar, ya que de repente la realidad se impuso en las mentes de todos nosotros y el silencio pareció abrirse paso para dejar la mayor duda que un ser humano puede llegar a vivir:
-¿Estarían ustedes dispuestos a arriesgar sus vidas y las de sus familias por esconder a alguien que no conocen? Quiera Di-s, jamás nos veamos en este predicamento.
La asistencia a este evento fue muy importante. Podemos decir, que como cada año, la comunidad se reunió para rendir homenaje a los héroes y a las víctimas del crimen más terrible que ha cometido la humanidad.
También, la Morá Mónica Kligman, dio una conferencia en la que explicó, mediante una presentación gráfica, fotografías y videos, la historia de la Shoá, y asistieron miembros de la Comunidad Judía, así como también padres de los alumnos que actualmente acuden al colegio. Fue conmovedor ver las lágrimas en sus ojos al comprender lo que realmente sucedió. Felicidades a Mónica, que supo explicar este fenómeno ampliándolo hasta el día de hoy y la importancia de la educación en pro de los derechos de aquellos con una forma de pensar, o de ser diferente.
