SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – El presidente de la Agencia Judía Natan Sharansky habla sobre el acto de equilibrio con los judíos europeos – la protección de los que optan por quedarse, y el empoderamiento de los que optan por irse.
Por Noa Amouyal
No es necesario estar muy atentos para darse cuenta de que los judíos europeos están en modo de crisis.
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El trágico atentado de mayo en el Museo Judío de Bélgica, donde murieron cuatro personas; el tiroteo macabro en el mercado Hyper Cacher en Francia en enero que se cobró otras cuatro vidas; y repetidos incidentes de palizas, acoso y vandalismo de sitios judíos apuntan a una tendencia alarmante: el antisemitismo está en aumento y funcionarios de la UE están luchando para encontrar la manera de combatirlo.
Teniendo en cuenta todo lo que ha visto en su ilustre carrera como político, estadista y activista de derechos humanos, el presidente de la Agencia Judía, Natan Sharansky no es presa del pánico cuando se enfrenta a una realidad tan sombría. Sus observaciones son medidas y sus soluciones – espera – realistas.
“Creo que el mayor desafío es que el antisemitismo vuelve a todas estas áreas del mundo libre”, dijo durante una discusión franca con los editores de The Jerusalem Post anterior este mes.
“Creo que, mientras que las personas lo conocen y escriben sobre ello, subestiman su poder”.
Para Sharansky dicha corriente de antisemitismo europeo proviene de dos fuentes. La primera es el clásico antisemitismo – donde el trasfondo de sentimiento antijudío nefasto siempre ha tenido presencia en el continente.
El segundo, y quizás más preocupante, proviene de los liberales que se oponen a Israel y su tratamiento de los palestinos. Como las protestas europeas durante la guerra de Gaza el año pasado demostraron, dijo, la retórica anti-Israel puede convertirse en antijudía en un abrir y cerrar de ojos.
“Es absolutamente aceptado en la Francia liberal que Israel es uno de los mayores violadores de los derechos humanos en el mundo”, dijo Sharansky, en referencia a la abstención de Francia el mes pasado en la Comisión de la ONU sobre la Condición de la Mujer – donde Israel fue condenado por su trato a las mujeres palestinas, mientras que países como Siria y Arabia Saudita ni siquiera se mencionaron.
De los 42 países con derecho a voto, 27 votaron a favor de condenar a Israel, 13 se abstuvieron y EE.UU. e Israel fueron las únicas voces en contra.
Mientras que Francia hace la vista gorda a la aprobación de los movimientos anti-Israel en los organismos internacionales, está al mismo tiempo en la promoción de grupos de trabajo para luchar contra el antisemitismo.
La jefa de política exterior de la Unión Europea Federica Mogherini, por ejemplo, pidió la creación de una fuerza de tarea tan sólo el mes pasado. Así, mientras que hay simpatía en Europa para actos antisemitas flagrantemente violentos, dijo Sharansky, algunos europeos ven las acciones perpetradas por el gobierno israelí como igual de despreciables, si no peores.
“Hay una Francia liberal, donde es natural que los judíos son una cosa, pero el Estado sionista es la principal aberración del mundo libre normal”, dijo. “Es inevitable entonces, que las actitudes anti-Israel se transformen en anti-judías“. Como mínimo, agregó, pone a muchos judíos en la incómoda posición de verse presionados a divorciarse de cualquier lealtad que tengan hacia Israel. “Así que de repente se vuelve incómodo”, continuó Sharansky.”Y estas reuniones sobre la deslegitimación de Israel, que venían de un lugar muy diferente que el antisemitismo clásico, hacen que sea difícil para los judíos ser parte de la Francia moderna”.
Sharansky recordó hablando con una joven belga después del ataque del Museo Judío en Bruselas. Cuando se le preguntó si sentía que todavía había futuro para los judíos en Europa, respondió: “Absolutamente, sí. Pero tenemos que convencer a los que nos rodean de que no tenemos nada que ver con Israel”.
La atmósfera actual deja a muchos judíos de Europa en una encrucijada donde se les obliga bien a hacer aliá o asimilarse – una opción que no es nada fácil a pesar de sus potenciales dificultades, Sharansky dice, la decisión de hacer aliá es la opción óptima.
“A los judíos europeos – tenemos que mostrarles por qué Israel es la mejor solución posible”, dijo. “Recuerdo qué polémico fue cuando la gente decía cómo es que en la Agencia Judía no repiten lo que dicen los políticos de venir a Israel inmediatamente. ¡Yo quiero que vengan todos! Y creo que la mejor manera de hacerlo es a través de la aliá. ” Pero cuando los políticos tratan de vender la aliá de los judíos europeos, dijo Sharansky, se puede levantar banderas rojas sobre la conexión entre las amenazas de seguridad y comenzar una nueva vida en Israel.
La señal del primer ministro Benjamin Netanyahu a miles de judíos franceses para hacer aliá a raíz del ataque en el Hyper Cacher puede ser contraproducente, dio a entender.
“Creo que es perjudicial que los judíos conecten la aliá al antisemitismo, a las amenazas, y piensen en Israel como refugio”, dijo Sharansky, aunque se cuidó de no hacer referencia específicamente al primer ministro como ejemplo directo de tales súplicas.
“Cuando hablamos de la aliá de elección – y, sin duda, la aliá francesa es una – de venir a Israel no debería ser una respuesta a los actos antisemitas.” Israel, argumentó, debe ser un faro para todos los judíos que buscan consolidar su conexión al judaísmo y asegurar que sus hijos sean criados para hacer lo mismo.
En el período inmediatamente posterior al ataque Hyper Cacher, la Agencia Judía previó que 15.000 judíos dejarían Francia por Israel en el próximo año.
Ahora, tres meses después de esas predicciones, Sharansky reconoció que tal previsión es “arriesgada”.
“Estoy tomando [en] cuenta no sólo la velocidad, sino la aceleración”, dijo. “Si nos fijamos en los casos abiertos, hay el doble de casos en este período de los que hubo el año anterior”.
Los casos abiertos – es decir las familias que se han acercado a la Agencia Judía para comenzar el proceso de aliá – aunque alentadores, no presentan todo el cuadro, dijo Sharansky. Es muy posible, e incluso probable, que muchas familias cambien de opinión sobre mudarse a Israel basados en el clima de Europa en los próximos meses.
“Con todos estos asesinatos horribles, y el clima tenso de enviar soldados a [proteger] escuelas, la gente puede pensar que están seguros y no vienen”, dijo, y agregó que los números más precisos estarán disponibles en el verano, cuando los niños ya no van a la escuela y los padres están en mejor posición para tomar una decisión importante.
“Las comunidades judías francesas son muy judías y están muy conectadas a la tradición, a su historia”, dijo. “Ahora se encuentran en un lugar en el que más de la mitad están pensando en irse y las cifras hablan por sí solas.
“El año pasado, un récord de 50.000 judíos franceses volvieron a la Agencia Judía para solicitar información acerca de inmigrar a Israel y 7.000 en realidad pasaron por el proceso, dijo la organización. La mayoría de los judíos franceses que no vienen son tradicionales y menos asimilados, dijo Sharansky.
“Esta aliá no se asimila, dijo. “Ellos [buscan] construir su conexión con la historia – puede ser que no besen mezuzot pero tienen un gran respeto por la tradición y por Israel”.
El líder de la Agencia Judía también fue rápido para negar la idea errónea de que todos los judíos franceses que vienen a Israel son ricos. Recordó una conversación que tuvo con un padre francés que estaba tratando desesperadamente de ahorrar el dinero suficiente para poder hacer aliá. “Estas personas pueden ser llevadas en los próximos dos o tres años”, dijo. “Necesitamos no simplemente decirles que vengan, sino darles incentivos para venir.”
El gobierno ha reconocido la necesidad de este tipo de incentivos, anunciando programas en febrero buscan 600 millones de NSI por año para el Ministerio de Inmigración y Absorción para impulsar la aliá.
Sharansky admitió que los métodos de la organización no eran perfectos, y que el rebelde que lleva dentro vuelve a la vida cuando le preguntan por los fracasos de la Agencia Judía.
“Tengo una larga historia de lucha contra la Agencia Judía y la lucha contra la absroción“, dijo. “Así que constantemente le digo a la gente, no te unas a mí, pelear conmigo! La Agencia Judía como parte de la creación tiene que ser presionada y criticada.
“Si los activistas quieren tener éxito, hay que criticar, pero también hay que saber cómo [a] movilizar a la administración y manejar el dinero y la influencia”, dijo. “Y asumir todo el crédito. Entonces sabes que has ganado”.
Fuente: The Jerusalem Post
