Por iniciativa del Instituto Cultural México Israel,representado ayer, 20 de julio por el Ing David Serur y la Sra Jennie Serur, un extraordinario busto de Gilberto Bosques recibirá a quienes visitan, frente al hemiciclo a Juárez, la plaza del mismo nombre.
La Comunidad judía de México dona este busto en homenaje a un hombre que extendió la mano a sus correligionarios en una de las peores épocas, la II Guerra Mundial, cuando estos eran cazados como ratas.
El lugar donde se coloca el busto es simbólico: entre la Secretaría de Relaciones Exteriores y el Museo Memoria y Tolerancia, la mirada benevolente de Bosques representa a nuestro México de brazos abiertos, el cual ofreció un refugio seguro a muchos de nosotros, nuestros padres o nuestros abuelos.
Se ha llamado a Gilberto Bosques, Cónsul General de México en Francia entre 1939 y 1944 el “Schindler mexicano”, pues salvó de la vorágine nazi la vida de familias enteras atrapadas en países hostiles. En palabras del canciller José Antonio Meade Kuribreña:
“Estas visas (que emitió Bosques) sirvieron de salvoconducto a los portadores para evitar arrestos y detenciones arbitrarias, bajo el argumento de que habían sido invitados a México, y finalmente salvaron la vida de todas estas personas”.
Enlace Judío apoyó la realización de un documental conmemorativo, realizado y difundido por Televisa, acerca de la vida y obra de este gran mexicano, docente, periodista y diplomático: “Gilberto Bosques, el hombre que desafió a los nazis”, el cual fue filmado en México, Francia, Alemania y Austria.
Personalidades destacadas de la Comunidad judía y del ámbito diplomático, así como amigos, admiradores y familias beneficiadas por la generosidad y humanismo del héroe acudieron a la develación del busto creado por los escultores Laura Bueno Álvaro y Ricardo Sánchez Téllez.
De parte de la familia Bosques acudió su nuera, Anne Marie Tistler de Bosques; su nieta, Teresa y su nieto Gilberto.
Las palabras de la Sra Jennie de Serur resonaron junto a la efigie del gran hombre: “Por los alcances de su tarea y las decisiones de su tiempo, hoy tiene un lugar poco conocido entre los héroes de la humanidad. Dedicó su vida a todas las personas que pueden vivir bajo el cobijo de la dignidad humana, mediante el respeto a los derechos humanos en todo lugar, en todo tiempo”.
“Se volvió un mexicano universal, un ciudadano del mundo”.